La mayoría de las veces, la falta de continuidad, de disciplina, de asesoramiento y el completo desconocimiento sobre la práctica deportiva hace que las personas terminen abandonando sin haber logrado sus objetivos. Mantener la motivación y la rutina puede ser o parecer una cuestión complicada. Sin embargo, los gimnasios están llenos de una amplia oferta de actividades dirigidas. En estas, bajo la supervisión de un profesional, se aprovecha el tiempo al máximo y se consiguen los objetivos deseados.
Las clases colectivas, además de ser beneficiosas para profesionales lo son también para personas sin preparación o experiencia previa. En estas clases, los monitores orientan a los alumnos, evitando lesiones, enseñando ejercicios, posturas y estiramientos.
Qué se consigue con las clases grupales
En tu gimnasio, lo más probable es que encuentres una gran cantidad de ejercicios. Lo cierto es que, según han afirmado muchos expertos, entrenar en grupo tiene un enorme poder social. El alumno se siente mucho más motivado y, por tanto, no suele abandonar la práctica deportiva sin haber siquiera alcanzado sus objetivos.
Asistir a clases grupales aporta sentimiento de pertenencia. Esto hace que el alumno se sienta más animado a asistir a clase. Sin embargo, no se trabaja más que haciéndolo por cuenta propia, aunque sí se hace de forma más constante y guiada.
Existen clases con diferentes funciones. Por un lado encontrarás aquellas agrupadas dentro de las cardiovasculares, cuyo objetivo es acelerar el corazón y quemar el mayor número de calorías posible. Las clases de fuerza, que ayudan a la tonificación y el fortalecimiento de los músculos y las relacionadas con el equilibrio entre cuerpo y mente, que buscan el estiramiento y la relajación. Todas las clases son beneficiosas y la elección de unas u otras debe estar determinada según los objetivos de cada uno.
Las mejores clases del gimnasio
Entre las clases más comunes que encontrarás en el gimnasio están:
Body Combat. Es una clase que ayuda a quemar calorías y descargar la adrenalina que tiene nuestro cuerpo. A la misma vez, ofrece un alto rendimiento cardiovascular. Acelera bastante el corazón mediante una combinación de ejercicios de artes marciales, boxeo, kárate… En esta clase se entrena la potencia, la fuerza, la resistencia, la coordinación, la flexibilidad y el componente aeróbico. En una clase de bodycombat se pueden quemar alrededor de 600 calorías.
Crossfit. Sin duda, esta clase no es para principiantes. Se trata de una de las clases más exigente y que mayor gasto energético conlleva. en una sesión se pueden quemar hasta 600 calorías. Además, el monitor se empeña mucho en que el alumno se esfuerce al máximo. El crossfit combina tanto trabajo cardiovascular como ejercicios de fuerza y entrenamientos interválicos.
Body pump. Es una clase centrada en la musculación, una parte fundamental del entrenamiento si lo que se busca es adelgazar y mantener el peso. Al ritmo de la música se trabajan distintas zonas musculares. Además, en bodypump cada uno elige el peso que quiere incorporar, por lo que se adapta a las necesidades de todos. Las clases se pueden utilizar tanto si nuestra finalidad es definir, como si es tonificar o aumentar la masa muscular. En una clase se pueden quemar 300 calorías. Lo ideal es hacer una combinación de bodypump con entrenamientos cardiovasculares.
Spinning. Esta actividad es completamente cardiovascular y lleva al corazón a sus máximas pulsaciones. A través del pesaleo, y siguiendo el ritmo de la música, los alumnos tendrán que combinar y fraccionar su energía según potencia, resistencia y velocidad. En una clase se pueden consumir hasta 700 calorías.
Estas clases son algunas de las más intensas, pero lo cierto es que existen muchas otras con las que podrás lograr tus objetivos.