Reducir la grasa abdominal o, como se suele decir, ‘bajar barriga’, es una de las cuestiones que más preocupa a las personas que se plantean perder peso. De hecho, si hubiera una fórmula para conseguir ese vientre plano tan explotado por la publicidad muchas personas se plantearían adelgazar un poco.
En cualquier caso, si piensas que tu mayor problema con la grasa abdominal es estético, hay una mala noticia. Te guste o no tu barriguita, ese es el menor de tus problemas.
El exceso de grasa abdominal es un problema de salud muy serio
La grasa abdominal es, como su nombre indica, la grasa alrededor del abdomen. Sin embargo, hay dos tipos de grasa abdominal. Por una parte está la grasa visceral, que es la que rodea los órganos o vísceras. Por otro lado está la grasa subcutánea, que es la que se encuentra debajo de la piel.
Las complicaciones para salud de la grasa visceral son más peligrosas y dañinas que las de la grasa subcutánea.
En cualquier caso, el exceso de grasa abdominal puede aumentar el riesgo de enfermedad del corazón, ataques al corazón, hipertensión, diabetes tipo 2, asma, cáncer de mama, cáncer de colon y enfermedad de Alzheimer y otros tipos de demencia.
Claves para reducir la grasa abdominal
Una de las principales medidas que se pueden tomar para reducir la grasa abdominal es mejora la dieta. Puede parecer obvio, pero a pesar de ello es fundamental insistir en ello. Mejorar la dieta implica aumentar el consumo de alimentos saludables (frutas, verduras, alimentos integrales, proteínas de alta calidad, alimentos ricos en fibra, agua…) y reducir el consumo de productos dañinos, como azúcares refinados, harinas refinadas y grasas saturadas consideradas dañinas.
Reducir el consumo de alcohol también ayuda a reducir la grasa abdominal, así como dejar de fumar.
Otro factor que ayuda a reducir la grasa abdominal es reducir el estrés. El estrés puede hacer que ganes grasa abdominal al activar las glándulas suprarrenales para producir cortisol, también conocida como la hormona del estrés. De hecho, se ha demostrado que los niveles altos de cortisol aumentan el apetito y estimulan el almacenamiento de grasa abdominal.
Dormir bien también puede ayudar a reducir la grasa abdominal. El sueño es vital para la salud. De hecho,poco descanso puede tener un impacto severo en el bienestar.
El propósito principal del sueño es permitir que el cuerpo descanse, se cure y se recupere, pero también puede tener un impacto en el peso de una persona. Diversos estudios demuestran que las personas que no duermen lo suficiente tienden a ganar más peso, lo que puede incluir grasa abdominal.
Hacer ejercicio aeróbico es otra forma efectiva de reducir la grasa abdominal. De hecho, los estudios también muestran que es una de las formas más efectivas de ejercicio para reducir la grasa abdominal.
Además, hacer ejercicio con pesas también ayuda a reducir la grasa abdominal. El entrenamiento de resistencia o de fuerza es importante para preservar y ganar masa muscular. Según los estudio, también puede ser beneficioso para la pérdida de grasa abdominal, incluida la grasa visceral.
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