¿Porqué nos mordemos las uñas?
A este trastorno se le conoce científicamente como onicofagia y es una enfermedad de carácter psicológico. Por consiguiente, el hacer de esto un hábito inusual, lo puede convertir en un trastorno no controlable. Estudios realizados por otras organizaciones han demostrado que alrededor del 40% de la población adolescente padece o ha padecido esta enfermedad.
¿Cómo puede afectar este mal hábito a nuestra salud?
Nos puede afectar desde la piel, hasta incluso dentro de nuestro organismo. Esto se debe a que al morder las uñas no solo devastamos el área cutánea o las membranas que forman nuestras uñas. También, vamos desgarrando la piel ocasionándonos heridas que pueden infectarse. Por lo general, las manos son nuestra principal herramienta natural de trabajo. Con ellas, preparamos alimentos, nos maquillamos, manipulamos nuestros celulares. De hecho, ¿Quien no ha escuchado o leído alguna vez que en el teclado de un ordenador se encuentran tantos o más microbios que en un inodoro?
Como consecuencia, todo esto convierte a nuestras manos en vehículos transportadores de gérmenes infecciosos. Los cuales, se acumulan en nuestras uñas y que al llevárnoslas a la boca pueden convertirse en bacterias. Esto, puede causar daños en nuestro organismo o provocarnos fuertes dolores abdominales.
La meta es aprender a cómo dejar de comerse las uñas
Lo primero que tienes que pensar es, en afrontar tu caso. Primeramente, supongamos que tienes la costumbre de hacerlo, ya sea por ansiedad o por manía. Incluso, sabemos que es difícil luchar contra la costumbre, pero se puede intercambiar por algo que no te haga tanto daño. Pudiese ser algo que no sea malo para tu salud, a continuación, para aprender a cómo dejar de comerse las uñas.
1. Intercambio positivo: ten siempre a mano algo que puedas cambiar por tus uñas, y espero no estés pensando en fumar. Pudiera ser, un bolígrafo, una correa, una manzana, cualquier objeto es posible.
2. Recordar lo mal que se ve: una buena manera de aprender a cómo dejar de comerse las uñas, es recordar algún episodio no muy agradable, relacionado con tu mal habito de comerte las uñas. Tal vez, tuviste una mala experiencia en el pasado, cuando tu pareja te capturo comiéndote las uñas.
3. Manos hermosas: unas uñas bien arregladas son el accesorio perfecto de unas manos delicadas. Pero si, por el contrario tienes unas manos suaves, pero las uñas desaparecieron, no se ven bien. Queremos animarte a mostrar tus manos sin temor a ocultarlas. Para ello, intenta mantenerlas siempre arregladas. Por consiguiente, si la ves con esmalte te costará más comértelas. De hecho, puedes agregar a tu esmalte preferido, ajo o picante.
4. Entretenimiento divertido: para poner en práctica nuestros consejos sobre cómo dejar de comerse las uñas, es necesario que mantengas tu mente distraída. Comúnmente, el ocio es el primer factor que desencadena las ansias de devorarte las uñas.
5. Deporte anti-mordidas: para saciar el hambre que tienes por las uñas, intenta inscribirte en alguna práctica deportiva. De hecho, puede ser tu preferida. Por las tardes, saca tu bicicleta y da un paseo al aire libre. Incluso, puedes inscribirte en una clase de natación. Además, con estas disciplinas estarás favoreciendo tu cuerpo también.
Las uñas no saben nada bien
Cuando veas a tus uñas destrozadas a causas de tus mordidas, piensa ¿Las uñas tienen algún sabor? Realmente no, incluso hay mejores sabores en la vida. Para poner en práctica nuestros excelentes consejos sobre cómo dejar de comerse las uñas, debes realizar un ejercicio de visualización. Para ello, imagínate en una importante junta de trabajo comiéndote las uñas. De hecho, puedes coincidir en que esto no se ve nada bien. Incluso, puede perjudicar seriamente la percepción que tienen tus compañeros de trabajo hacia tu profesionalismo. Por lo tanto, piénsalo dos veces antes de querer devorarte tus uñas.
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