Quizás antes de explicar cómo se crea una alergia debería hacer una breve introducción de cómo funcionamos y así tendremos un marco con el que avalar la explicación.
En general, y reduciendo mucho mucho, explicaré que a grosso modo, estamos divididos en tres partes:
Mente (donde residen pensamiento e inteligencia),
Cerebro Automático (director de la biología y encargados de mantenernos con vida... unos instantes más, es como un ordenador, sus capacidades deductivas son muy similares a las del entrañable Sheldon Cooper de la serie Big Bang), y por último,
el cuerpo o la Biología.
El estrés y las enfermedades
Uno de los trabajos del Cerebro Automático es evitar que la Mente acumule o sobrepase cierta cantidad de estrés, por protección del conjunto entero de 3 piezas, se decir de nosotros mismos.
Cuando los niveles de estrés superan el límite el cerebro se ve obligado a crear una enfermedad o síntoma y de este modo traslada el problema sobre la Biología; una vez en la Biología le ha ganado tiempo al reloj para poder resolverlo con calma y, en la mayoría de los casos, una vez desahogado poco a poco desaparecerá, más no en el caso de las Alergias.
Cómo surge la alergia
Ahora si voy a contaros cómo y cuando el cerebro decide crear una alergia, y para qué le es útil, y recordad que no es inteligente, es hábil pero como el encantador personaje que he citado arriba, el cual resulta coherente pero a la vez incongruente y en ocasiones hasta desafortunado.
Cada vez que nuestros niveles de estrés en la Mente se disparan, el Cerebro va a sacar su libreta y apunta todo cuanto haya alrededor en ese preciso instante y lo va a guardar en una carpeta roja, cada vez que una de las substancias que percibidas por alguno de los 5 sentidos vuelva a entrar de forma automática va a saltar una alarma que va a provocar todo tipo de rechazo físico y va a obligar a alejarse a la persona de lo que le produce la alergia.
Es de este modo que el Cerebro cree estar protegiendo a la Mente de otro estrés similar al del día en que se graba la alergia, como veis la lógica es aplastante, incluso Sócrates (creador del sofismo) estaría de acuerdo pero en la práctica resulta absolutamente disparatado, ya que no suele ser vinculante lo que pueda causar estrés con el polen, gluten, lana etc... no obstante como al Cerebro no le gusta dejar cabos sueltos, ni tomar riesgos que retiene innecesarios y siempre prefiere sacrificar una parte para proteger al resto .. pues nos vuelve locos a estornudos y a picores.
Espero que esta breve y resumidísima explicación haya sido suficiente para comprender un mecanismo tan basto bajo el cual funcionamos.
Ahora pondré cara y ojos a esta armónica conjunción de realidad para terminar el fascinante puzzle que responde a nuestro funcionamiento Biológico.
Ejemplo nº1
Esta chica vino a consulta con alergia a las obras, cada vez que entraba en un recinto recién construido o reformado la alergia se descontrolaba. Resulta que hace años la chica que estaba haciendo una obra en su casa, recién puesto el yeso con lo cual húmedo recibe una llamada que le anuncia la muerte de su abuelo, años después cada vez que entraba en una obra, sobre todo si era reciente que todavía olía a yeso y teniendo en cuenta que el abuelo además había sido paleta, (con lo cual la asociación era doble ) empezaba con los síntomas de la alergia, en una sola consulta llegamos a la conclusión, su Mente lo entendió y anuló el programa creado por su Cerebro Automático, la hice ir a una obra y enviarme un whatsapp desde allí y efectivamente había desaparecido.
Ejemplo nº2
Una madre viene con su hija de 15 años, que a los 11 años le empezó la celiaquía, y su hijo de 11 que comienza a dolerle la barriga y se temen que también la tenga. Su hija además suele vomitar los viernes. Así que le pregunto que le pasó a los 11 años en relación al pan, o una panadería... y ya no me deja seguir porque muy sorprendida me dice: mis padres tenían una tienda de alimentación-panadería, y a partir de esa edad cuando llegaba el viernes por la tarde ya no podía irme a jugar con las compañeras, o más adelante salir el fin de semana porque me quedaba allí para ayudar.
Y como mis padres no hacían fiesta ni sábados ni domingos, ni festivos, nunca podía salir.., solo el Viernes Santo! -Es decir que no eran barras de pan, sino barrotes (haciendo referencia a la prisión). La madre hizo un desplazamiento de su emoción negativa, de disgusto y desvalorización, de separación de sus amigas, al pan. De alguna manera culpó al pan, o los productos con trigo.., luego sus hijos hacían las patologías cuando se acercaban a la edad en que la madre vivió el conflicto y vivían cualquier separación o conflicto relacional. su hijo mejoró de los dolores rápidamente, y su hija ya come de todo.
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