Vamos a dar unos breves consejos para ser más constantes:
1- Lo más sencillo es apuntarse a una escuela y pagar las cuotas de varios meses por adelantado. Aparte de asegurar la constancia, quizá obtengamos algún descuento al pagar por adelantado. Cuando hay dinero de por medio, nos comprometemos más activamente en asegurar nuestra inversión, y eso nos dará un plus de motivación para ser más constantes.
2- Si no podemos -o no queremos- apuntarnos a ninguna escuela, y decidimos hacer yoga en casa por nuestra cuenta, con la ayuda de vídeos, libros y artículos, no olvides estos consejos para aumentar tu motivación y tu deseo por practicar yoga:
- Ten preparada ya la esterilla en un rincón de tu casa. Si tienes sitio, esto es ideal, ya que el hecho de preparar el lugar, mover muebles, extender la esterilla, etc, nos dará tanta pereza que abandonaremos rápido. En cambio, si tenemos ya preparado de forma permanente el lugar, aparte de verlo y recordarlo cada vez que pasemos, será mucho más fácil descalzarnos y hacer nuestra rutina de yoga.
- Trata de hacer la práctica a la misma hora. No lo hagas cuando te apetezca, ni cuando te venga bien. Create un calendario y síguelo. Por ejemplo: Martes y jueves de 19 a 20. Y síguelo. Si necesitas modificarlo o añadir días, hazlo. Imprímelo y tenlo a la vista.
- No te exijas demasiado. Empieza siempre con rutinas cortas y fáciles. Recuerda el método Kaizen. Si haces cosas muy exigentes al principio, te cansarás, “te quemarás” y abandonarás. “Vayamos despacio pues tenemos prisa”.
- Consulta en foros, haz preguntas, contacta con más gente que practique yoga en casa. Juntos podréis intercambiar opiniones y motivaros los unos a los otros.
- Recuerda que la clave del éxito es adquirir el hábito. El hábito facilita muchísimo las cosas. El problema suele ser que la mayoría de la gente abandona antes de consolidar el hábito, y entonces surge la inconstancia. Hace falta tiempo: semanas o incluso meses de práctica ininterrumpida hasta consolidar el hábito.
- El curso de yoga para principiantes puede resultar sencillo, pero está especialmente diseñado para crear el hábito. Si eres principiante o has perdido la constancia y necesitas recuperarla, este puede ser tu curso.
- Una vez adquirido un hábito sólido y experiencia, puedes organizar tu práctica como mejor creas conveniente. Pero no te olvides de seguir aprendiendo. Siempre hay cosas nuevas que aprender.
¡Ánimo!
Aimar Rollán