Aunque esta técnica de prevención está extendida en prácticamente la totalidad de la población infantil de los países desarrollados, siendo un porcentaje ínfimo los padres que se niegan a vacunar a sus hijos, aún queda mucho por hacer. Uno de los puntos que más inquieta a los expertos es la falta de información sobre las vacunas necesarias en la edad adulta.
Vacunas para todos
Los niños y adolescentes reciben gratuitamente las vacunas pertinentes en los centros escolares pero, pasada esta época, son pocos los que siguen el calendario de vacunación. En este sentido, Ramón Cisterna, coordinador del Grupo de Estudio de Vacunación en el Adulto (GEsVA), insiste en que "la vacunación es la medida preventiva frente a la infección más eficaz que existe hoy en día, también para los adultos".A pesar de que, por lo general, las vacunas que nos administran cuando somos pequeños nos protegen de muchas enfermedades, hay algunas infecciones ante las que hay que suministrar una dosis adicional, popularmente conocida como de 'recuerdo', y otras ante las que debemos vacunarnos periódicamente. Cisterna asegura que, por ejemplo, el tétanos "cada año provoca entre 25 y 30 casos en adultos" que podrían evitarse con una vacuna.
Evitar los riesgos
Los mayores deben recurrir a la vacunación para prevenir algunas enfermedades. Es el caso de "trastornos víricos como la gripe o el herpes zóster, y afecciones bacterianas, como las infecciones neumocócicas o el tétanos", detalla el doctor.Para tratar de disminuir estos riesgos, el GEsVA pone a disposición de la población información y un calendario de vacunación para el adulto. "En él se recomienda una dosis de recuerdo del tétanos y la difteria cada 10 años, otra entre los 15 y 39 para prevenir el sarampión, las paperas y la rubéola, así como la protección contra la Hepatitis B, el meningococo C, la gripe y el neumococo", enumera el experto.
Falta información
El problema es que la mayor parte de los adultos desconoce la importancia de la vacunación. Esto es lo que se ha puesto de manifiesto tras conocer las conclusiones del 'Estudio de conocimiento y actitudes en la vacunación en el adulto' realizado por el GEsVA. Los datos aseguran que "tres de cada 10 adultos no se había vuelto a vacunar desde la infancia".Ramón Cisterna también alerta de que "un alto porcentaje de las personas que se vacunó del tétanos, lo hizo cuando ya corría un riesgo porque se había hecho una herida, por ejemplo". El doctor considera que este dato es muy importante, ya que demuestra "que es necesario incidir en la prevención", y tratar de crear conciencia y unos hábitos correctos de vacunación.
Precisamente, éste es el motivo que les ha llevado a promover una fuente de información válida, como es el caso de la página web de este grupo de trabajo. Además, aseguran que, al menos en España, "cada comunidad autónoma cubre las vacunas que tienen incluidas en su calendario de vacunación oficial", y que una visita al médico bastará para conocer mejor y poder llevar a cabo las indicaciones pertinentes para la prevención.