La razón más común por la que una mujer puede presentar una secreción vaginal amarillenta y otros síntomas como un fuerte olor y picor es una infección por levaduras. Sin embargo existen otros factores que podrían estar provocando la secreción anormal, por ejemplo: desequilibrios hormonales, una deficiente higiene personal e incluso el uso de ropa interior ajustada. Veamos los posibles tratamientos para el flujo amarillo y los síntomas asociados.
Si el nivel de afección es grave, es muy conveniente que solicites la ayuda de un profesional médico; él está capacitado para diagnosticar y definir un tratamiento que regularmente se basa en la medicación de antimicóticos y antifúngicos. Pero si tu caso no revierte una gravedad notoria, hay algunas medidas que puedes tomar a fin de tratar el flujo vaginal amarillo en casa:
Mezcla agua con vinagre de sidra de manzana y un poco de ajo. Aplica esta solución en sus partes íntimas y enjuaga cuando sientas escozor. Realiza esto hasta que notes que la secreción vaginal vuelve a su color normal.
Usa prendas de vestir más holgadas o ropa que no esté tan ajustada en la zona de la entrepierna. Siempre que puedas, elige usar ropa interior de algodón y reduce al mínimo el uso de prendas manufacturadas con materiales sintéticos.
Incluye en tu dieta diaria, al menos una porción de yogur natural y bebe suero de leche, esto te servirá como tratamiento para la infección por levadura y el flujo amarillo asociado a esta alteración.
Una disciplina adecuada en la higiene personal es fundamental cuando se trata de eliminar la secreción de flujo amarillo.
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