En el vídeo de hoy os cuento todos mis Remedios para la afonía y cómo me libré de una operación. Es algo complicado y me lo he pensado muchísimo antes de decidirme a hacerlo. Sé que con la salud no se juega, pero mi situación ha sido tan desesperante y he sentido tanta impotencia mientras padecía la enfermedad, que si puede ayudar a alguien ahí va mi contribución.
El cuerpo siempre pasa factura
Siempre, siempre, siempre, hay que acudir al médico, que es el profesional de nuestra salud. pero si a mayores podemos ayudar poniendo de nuestra parte un cuidado y fuerza de voluntad en mejorar, conseguiremos antes nuestros objetivos y le estaremos ayudando a él.Mi peque tenía casi dos añitos, y yo estaba extenuada. Combinar la casa, el trabajo y el cuidado de la peque no es tarea sencilla. Siempre había sufrido de afonía, cuando era joven por salir por la noche y fumar. Y cuando era “menos joven” por trabajar como una burrita y darle palizas al cuerpo. No lo voy a negar, cuando toca trabajar lo doy todo y llega un momento en el que el cuerpo pasa factura. Ahora además tenía que combinarlo todo a mayores con mi peque, Marina. Los niños son una bendición, pero también una dedicación. Lo que importa es que el sumatorio es positivo. Pero bueno, ese quizá sea un tema de conversación para otra entrada…
El caso es que en el vídeo que tenéis a continuación, os muestro cómo conseguí incluso librarme de una operación con ingreso de al menos un día.
¿Cómo me libré de una operación?
Espero que os sirva de ayuda, y si así es, que me escribáis para contármelo. Al fin y al cabo, ¿quién soy yo si no eres tú?
Un besazo y hasta la próxima entrada.