Tenía pendiente y a medias este post en el blog sobre la recuperación de mi segundo embarazo. En las diferentes visitas que he ido haciendo y compartiendo he visto que era algo de mucho interés entre mis lectoras y seguidoras de redes así que me he decidido a compartirlo con todas vosotras.
Después de mi primer embarazo hice poco más que la revisión de la cuarentena con mi ginecóloga. Creo que ni tan siquiera sabía lo que era el suelo pélvico, y el hecho de haber tenido un parto tan bueno, sin puntos, y encontrarme bien a nivel físico hizo que diera por supuesto que todo estaba recuperado. El caso es que con Valentina, fue al cabo de varios meses, quizás al año que empecé a notar que algo no estaba bien del todo. Con la necesidad imperiosa de tener que portear a todas horas, hacía delante y cada vez a una niña de más peso, teniendo que hacer a menudo movimientos cortos y repetitivos para dormirla hizo que mi SP se resintiera y que en ocasiones empezara a tener incluso perdidas en algunas épocas. Me asusté, tenía solo 28 años ¿y estaba así? En una visita a la fisio para que hiciera reset a mi espalda (que también se resentía mucho), se lo comenté y además he mandarme algunos ejercicios me recomendó que empezara a portear por la espalda para no sobrecargar la zona.
Así lo hice y la cosa mejoró muchísimo. Pasé algunas épocas peores pero, ya sabéis. El frenesí del día a día hace que a veces nos descuidemos nosotras mismas ¡MAL!
Con el segundo embarazo, durante los últimos meses ya vi que la recuperación sería muy distinta ya que las pérdidas aparecieron mucho antes de llevar a la FPP. Además, una faringitis en la semana 20 me provocó una hernia umbilical debido al esfuerzo y a la presión que ejercía. Lo bueno de todo esto fue que antes de parir ya me informé y tuve tiempo de prepararme para lo que vendría después. Evidentemente no sabíamos cómo quedaría la hernia, pero que tendríamos que reforzar mucho la musculatura pélvica (ya que la que lo sostiene todo) estaba más que claro.
Como siempre, ya sabéis que recurro y confío 100% en Moviment Nat, un centro especializado y con grandes profesionales. El embarazo y el parto son elementos que ponen en riesgo el equilibrio de nuestro suelo pélvico y la funcionalidad de la faja abdominal, cosa que en mi caso estaba bastante “fastidiada”. Es por ello que se recomiendo siempre, aunque todo haya ido bien, que después de los partos se haga una revisión abdomino-pélvica; es decir, del abdomen, el perineo y el suelo pélvico. Os cuento, conjuntamente con la fisio del centro toda la info que creo que os puede interesar y resolver todas las dudas que me hicisteis llegar hace unos meses:
¿Cuándo visitar una fisio especializada en suelo pélvico?
Pasada la cuarentena, tanto para un parto vaginal como con cesáreas. Aunque el bebé no haya pasado por el canal de parto no quiere decir que el suelo pélvico haya presentado alteraciones
¿En qué consiste una sesión?
En estas sesiones se mira el equilibrio del suelo pélvico y la funcionalidad de la faja abdominal que puede quedar alterada. Estos dos sistemas tienen funciones en la digestión y defecación, en la micción, en la función sexual y la musculoesquélica, ya que son la base de nuestra espalda. Por lo tanto, se hace una mirada exhaustiva de la fuerza, del tono musucular, de su capacidad de activación y trabajo en equipo, si son continentes o no (tanto a nivel de pipis, gases o defecaciones) y sobre todo si hay alguna lesión en alguno de los tejidos: diástasis, hernias, episiotomías, esguinces…
La exploración de una sesión es tanto externa como interna. No duele para nada, puede ser molesta. Para que os hagáis una idea es como una revisión ginecológica pero más extensa. En la exploración se observa:
La postura: durante el embarazo, la barriga de embarazada genera cambios en nuestra postura y es necesario recuperarla para mejorar las presionas y evitar lesiones posteriores
La movilidad: el exceso de movilidad al final del embaraazo y el parto puedo provocar que la pelvis no vuelva a la posición idónea o bien se quede bloqueada. Por ejemplo, doloe en el coxis después de parir como me pasó a mi.
La faja abdominal y la linea alba: el aumento del perímetro abdominal en el embarazo puedo haber provocado lesiones como hérnias (en mi caso), una elongación de la línea alba (diástasis), una disminución de la fuerza, del tono o de la capacidad de activación (de respuesta) de la musculatura abdominal.
El suelo pélvico: mediante la palpación vía intracavitaria se valora el estado de la musculatura y la posición de las visceras con el fin de detectar alteraciones a este nivel, como por ejemplo las prolapsas.
Las cicatrices: en el caso que sean internas como las epsios o laceraciones o bien, externas como las cesareas. En necesario tratarlas para evitar que generen dolores o tensiones.
Una vez te han explorado se hace una valoración y el consiguiente tratamiento, que incluye desde terapia manual, técnicas de fiseoterapia, pautas de ejercicios y hábitos para la vida diaria.
Como podéis ver, es muy importante hacer una valoración del suelo pélvico, incluso aunque no haya una sintomatología después del parto, ya que con el tiempo puede aparecer y el tratamiento siempre es más complicado y menos eficiente.
Mi experiencia en Moviment Nat con el tratamiento ha sido muy positivo. Después de la primera visita y valoración, me fui a casa con mucha tarea pendiente y entre las técnicas de fisioterapia y mis ejercicios en tan solo un mes noté muchísima diferencia, la más clara: cero pérdidas, mucho más tono y prácticamente desaparecido el dolor abdominal causado por la hernia.
Ahora ya tengo el alta y puedo empezar a hacer más ejercicios, ya que mi intención es operarme en verano y me gustaría tener toda la zona abdominal más fuerte para poder enfrentarme a la operación y al post operativo de la manera más optima posible. Ya os iré contando, el día 1 empiezo (con Julieta) las clases de post parto e hipopresivos, ¡deseadme suerte!
Espero que os haya servido de ayuda el post de hoy, y sobre todo aportar un poco más de información y de luz sobre este tema. Aunque en esas semanas de un poco de reparo y lo último que te apetezca sea esto, vale la pena destinar un poco de esfuerzo por nuestra salud. Si queréis más info, os dejo el link de Moviment Nat aquí.