¿Qué tipo de geles debemos usar?
En establecimientos como farmacias o supermercados podemos encontrar una gran cantidad de productos desinfectantes para las manos. De hecho, a raíz de la pandemia, muchas empresas de cosmética han sido autorizadas para elaborar este tipo de geles. En cualquier caso, el factor principal a la hora de garantizar su eficacia es el contenido en alcohol, que debe ser superior al 60%. Más allá de eso, cuantos más ingredientes (como perfumes, por ejemplo) contenga el gel, más probable será que dañe nuestra piel.Cómo usar geles hidroalcohólicos
- En primer lugar, este tipo de producto se debe usar con las manos completamente secas.- A la hora de aplicarlo, echaremos un poco sobre la palma y frotaremos toda la superficie, incluido dedos, huecos entre ellos, dorso… durante al menos 20 segundos.
- Es importante esperar a que el producto se evapore (cuando se haya secado), pues es cuando habrá realizado por completo la función de desinfección.
Precauciones a la hora de usar geles hidroalcohólicos
- El uso reiterado de este tipo de productos puede provocar la irritación de las manos, sobre todo en pieles más sensibles, ya que tiende a resecar. Por eso, en esta época en la que lavamos o desinfectamos nuestras manos con mucha más frecuencia, es recomendable aplicar después una crema hidratante.- En el caso de que tengamos la piel sensible o la exposición a este tipo de geles nos haya provocado la aparición de algún eccema o irritación, lo mejor es acudir a nuestro médico o dermatólogo para que nos dé las indicaciones oportunas.
- Por su parte, si tenemos heridas en las manos, es mejor recurrir al lavado de manos con agua y jabón y evitar el uso de geles hidroalcohólicos.
- Además, si tras aplicar el gel vamos a estar expuestos al sol, se recomienda emplear un protector solar libre de alcohol.
- Es muy importante tener claro que estos geles, al llevar alcohol, son inflamables. Al aplicarlos sobre nuestras manos, tardarán apenas unos segundos en evaporarse. Sin embargo, el riesgo ocurre cuando, antes de que se haya secado, cometemos imprudencias como acercar las manos a fuentes de calor, como la cocina, o fumar.
- Por el mismo motivo anterior, es muy importante no dejar el producto bajo la incidencia directa del sol, o en espacios reducidos donde se acumule mucho calor como, por ejemplo, el coche en verano.
- En la medida de lo posible, el uso de este tipo de geles se recomienda en espacios ventilados. Por ejemplo, si te lo vas a echar dentro del coche, baja la ventanilla.
En cualquier caso, lo más recomendable y respetuoso con nuestra piel es recurrir al lavado de manos con agua jabón, y dejar los desinfectantes para aquellos casos en los que no tengamos a mano esa posibilidad. Así, el lavado de manos es siempre una medida de higiene necesaria, pero mucho más en un momento como el actual. De este modo, algunos momentos clave donde debemos recurrir al lavado de manos son:
Antes y después de cocinar.
Antes de comer.
Cuando atendamos a alguien enfermo.
Antes y después de curar heridas.
Después de ir al baño.
Después de cambiar un pañal.
Después de toser, estornudar (aunque recordad que lo recomendable es hacerlo sobre el codo), sonarnos, tocarnos la boca, nariz u ojos…
Después de tocar animales.
Después de tocar la basura.
Cuando estemos en espacios públicos, después de tocar elementos que hayan podido manipular o tocar otras personas: pomos, barandillas, mesas, cestas de la compra, pantallas, surtidores…
Esperamos que os haya resultado útil esta información. Nos vemos en el próximo artículo de Vivienda Saludable.
Fuentes: OCU, Agencia Española de medicamentos y productos sanitarios,