Sabías que tus uñas pueden darte pistas sobre tu salud general?!.
Resulta que las uñas de las manos y los pies pueden darte buenas señales sobre los eventos internos de tu cuerpo. Si bien ninguna de estas pistas es un diagnóstico de una enfermedad específica, las uñas de las manos y los pies pueden decir bastantes cosas sobre tu salud en general a través de su color, forma y textura.
1. UÑAS PÁLIDAS
Si presionas suavemente tu uña y se pone de color blanco, y al dejar de hacer presión siguen estando blancas o de normal están pálidas, esto puede significar: Anemia, desnutrición, enfermedad del hígado, o insuficiencia cardíaca cognitiva.
2. UÑAS BLANCAS
Si las uñas son blancas con bordes oscuros, pueden indicar problemas hepáticos, como la hepatitis.
Suele ser poco frecuente y en la mayoría de los casos suele ser hereditario.
3. UÑAS AMARILLAS
Es muy posible que tengas las uñas amarillas después de haber pintado tus uñas durante un tiempo sin haber utilizado antes una base (incluso usándola), por fumar (el alquitrán y la nicotina causan esa apariencia).
La causa más común suele ser hongos, enfermedades del hígado, riñón o enfermedad pulmonar, diabetes, falta de hierro y zinc.
4. UÑAS AZULADAS
Las uñas con un tinte azulado pueden significar que el cuerpo no está recibiendo suficiente oxígeno, lo que se traduce en una mala circulación sanguínea.
5. MANCHAS BLANCAS
El nombre científico se llama leuconiquia, y aunque siempre he oído que se debe a la falta de beber leche (calcio), puede también ser causada por falta de algunas vitaminas como: Hierro, vitamina a o vitamina b6.
Por norma general, suelen ser por un golpe en la uña y no es motivo de preocupación ya que desaparecerá con el crecimiento de la uña.
Otras causas más notorias y suelen ocurrir con menor frecuencia son: Psoriasis, colitis ulcerosa, nefritis y/o úlcera péptida.
6. UÑAS RIZADAS
Si la superficie de la uña está ondulada o picada, esto puede ser un signo temprano de psoriasis o artritis inflamatoria. La decoloración de la uña es común; la piel debajo de la uña puede parecer de color marrón rojizo.
7. UÑAS AGRIETADAS/ ROTAS
Las uñas secas y quebradizas que frecuentemente se agrietan o se parten se han relacionado con la enfermedad del tiroides. Agrietarse o dividirse combinado con un tono amarillento es más probable debido a una infección por hongos, el estrés o una mala alimentación.
8. UÑA ROJA
Llamado hemorragias en astilla, ya que se ven como pequeños fragmentos de color rojo o marrón debajo de las uñas, éstas son áreas pequeñas de sangrado que puede ser señal de infección en el corazón o en la sangre.
Si la piel alrededor de la uña aparece roja e hinchada, esto se conoce como inflamación del pliegue de la uña. Puede ser el resultado de lupus u otro trastorno del tejido conectivo. La infección también puede causar enrojecimiento e inflamación del pliegue de la uña.
9. LINEAS OSCURAS
Las líneas oscuras debajo de la uña deben ser investigadas tan pronto como sea posible. A veces son causados por el melanoma, la decoloración de la uña causada por el pigmento de la melanina,un golpe o una infección.
10. UÑAS PICADAS
Si sus uñas tienen múltiples hoyos o abolladuras, a menudo es un signo de psoriasis. Las picaduras de uñas también pueden deberse a trastornos del tejido conectivo (incluido el síndrome de Reiter) o alopecia areata, una enfermedad autoinmune que causa la pérdida de cabello.
11. UÑAS MORDIDAS
Puede ser un mal hábito morderse las uñas, pero en algunos casos puede ser un signo de ansiedad.
Para prevenir el daño a las uñas, evita:
Morderte las uñas o arrancarte la cutícula. Estos hábitos pueden dañar el lecho de la uña. Incluso una pequeña herida a lo largo de tu uña puede permitir que las bacterias u hongos penetren y causen una infección.
No mantener las uñas secas y limpias. Esto hace que crezcan bacterias debajo de las uñas. El contacto repetido o prolongado con el agua puede contribuir a que las uñas se partan. Usa guantes de goma forrados de algodón cuando laves los platos, limpies o uses productos químicos fuertes.
Arrancarte los padrastros. Podrías desgarrar tejido vivo junto con ellos. Es importante quitártelos cuidadosamente o empujar la cutícula hacia abajo.
Ignorar los problemas. Si tienes un problema con tus uñas que no desaparece espontáneamente o te acompañan otros síntomas, consulta a tu médico o dermatólogo para que lo evalúen.
Utilizar productos muy fuertes para el cuidado de tus uñas. Limita el uso del quitaesmalte. Si lo usas, escoge una fórmula sin acetona.
No leer las etiquetas de tus esmaltes. Al igual que hay ingredientes menos recomendables para tu base de maquillaje o crema hidratante, no todos los esmaltes son iguales, por ello evita los ingredientes que contengan productos químicos tóxicos como ftalato de dibutilo, formaldehído y tolueno, ya que estas toxinas pueden contribuir a la fragilidad, la división y el agrietamiento.
No darle un descanso a tus uñas. Pasar de un color de esmalte fuerte a otro sin darle un descanso a las uñas puede secarlas, volverlas amarillas y, con el tiempo, incluso debilitar la estructura de la uña. En el caso de una manicura en gel, es la exposición a la luz ultravioleta en el dispositivo de secado lo que puede dañar la piel debajo y alrededor de la uña.
No comer alimentos ricos en proteínas. Agregar vitaminas y suplementos como biotina, vitamina E y aceite de pescado a su régimen diario, al igual que comer alimentos ricos en proteínas como frijoles, pescado y nueces, ayudarán a tus uñas.
Si te preocupa la salud de tus uñas, acude siempre a tu médico