Hay ocasiones que lo que necesitamos es cambiar nuestros hábitos alimenticios a largo plazo, pero en otras ocasiones, únicamente necesitamos “unos días de desintoxicación” para volver a nuestro estado natural.
Hay que entender que, en la mayoría de los casos, necesitamos alternar dieta y ejercicio físico. Debemos tener en cuenta que realizar una dieta es un trabajo de todos los días. No debemos hacer dietas extremas, porque a la larga se produce el llamado efecto rebote que, además, tiene consecuencias malísimas para tu organismo.
Para adelgazar basta con seguir una serie de pautas y priorizar unos alimentes frente a otros. Pero, en muchas ocasiones, somos muchos los que necesitamos un menú específico: una dieta bien reglamentada que nos asegure la pérdida de peso efectiva y de forma sana. Es importante controlar los alimentos que comemos, pues hay unos que nos ayudarán a adelgazar ya que son más saludables.
Debemos entender que la pérdida de peso solo se consigue con esfuerzo, dedicación y tiempo.
Algunas Dietas
Existen diferentes dietas dependiendo de nuestras necesidades.
Dieta del limón. Con esta dieta conseguimos adelgazar de forma rápida. Esto se debe a que se basa en restringir la alimentación casi exclusivamente a alimentos diuréticos. Esta clase de alimentos son los que nos permiten eliminar el exceso de líquido del organismo. Lo que hacemos es provocar que nuestro organismo elimine líquidos. Está hecha para bajar de peso para un tiempo X concreto, no a largo plazo.
Dieta mediterránea. Es la dieta ideal para realizar si vives en España, ya que está vinculada a la tierra y al clima mediterráneo. Esto quiere decir que prioriza en alimentos frescos y saludables y tiene numerosos beneficios para la salud.
Dieta depurativa. Si lo que buscas es cuidar tu cuerpo y mantener sanos nuestro hígado y riñones, la mejor opción es una dieta depurativa, ya que se encarga de limpiar el organismo. Con esta dieta conseguimos equilibrar nuestra salud.
Qué necesita una dieta sana adelgazante
Para que una dieta sea realmente sana, es necesario que cuente con todos y cada uno de los nutrientes. Es importante no tener una carencia alimenticia. Debemos consumir menos calorías de las que quemamos. Comer frutas, verduras y cereales como la Avena. Hay que reducir el consumir de grasas y grasas saturadas, además de reducir el consumo de azúcar y sal.
Consecuencia de llevar una mala dieta
Llevar una mala dieta alimenticia puede provocarnos grandes problemas de salud como diabetes, hipertensión, sobrepeso, obesidad y enfermedades cardiovasculares. Todos necesitamos consumir determinados tipos de alimentos y nutrientes para ayudar a nuestra salud física y mental.
Además, no tomar suficientes alimentos con sustancias nutritivas fundamentales y vitaminas necesarias puede provocarnos un desbalance químico y mineral que nos provoque problemas de fatiga crónica, dolores musculares y calambres.
.