Después de llevar meses preparando la web, resulta que lo que más se está complicando es escribir el primer post.
Elegir el tema, empezar a redactar…y claro, también a tachar palabras, frases, y párrafos enteros.
Así que, decidimos empezar por el principio, escribiendo sobre por qué siempre decimos que SOMOS BIO y la importancia que esa palabra tiene para nosotras.A lo largo de nuestra trayectoria hemos llegado a la conclusión de que, además de naturales como la vida misma, nos gusta lo natural.
Somos amantes de la naturaleza, de lo simple y de la sencillez, y nos gustan los zumos de naranja que saben a naranja porque la naranja que se ha utilizado para hacer el zumo es simplemente una naranja.
Algo tan sencillo como saber lo que comemos puede convertirse en una tarea bastante complicada.
Probad a ir al supermercado y a leer la composición de cualquier producto de uso diario. ¿Conocéis todos los ingredientes?
Ahora sí, os preguntaréis, ¿por qué vegano? La respuesta es sencilla, y es que encontramos un claro nexo de unión entre la filosofía vegana y los productos ecológicos.
La lista de productos veganos está en constante crecimiento, de hecho, cada vez es más frecuente encontrar estos productos en las estanterías de los supermercados, pero, volvemos a lo mismo, ¿qué ocurre con su composición? ¿cuál es su procedencia?
Nuestros productos veganos son bio, están certificados y han pasado controles de calidad y sostenibilidad que los convierten en productos saludables, porque no siempre comer vegano está asociado a comer saludable.
Por eso, en nuestro blog hablaremos un poco de todo, pero cada uno de los artículos tendrá un denominador común, será ecofriendly. Ecológico, respetuoso con el medio ambiente y sostenible.
4 BUENOS MOTIVOS PARA CONSUMIR PRODUCTOS ECOLÓGICOS
1. No contienen aditivos ni pesticidas.
Los productos biológicos no contienen aditivos de síntesis, ni pesticidas o productos agroquímicos que interfieran en los ritmos naturales de los cultivos.
Los aditivos alimentarios sintéticos, carentes de nutrientes, tienen la función de mejorar el sabor y frescura de los productos, conservarlos durante más tiempo y mantener su textura, aunque tienen una desventaja en común, su componente químico y el riesgo de producción de enfermedades.
Por su parte, el uso de pesticidas, creados con el objetivo de erradicar plagas y control de hierbas, contaminan el agua y transfieren sustancias tóxicas a los alimentos.De ahí que la alimentación ecológica se basa en ingredientes cultivados o elaborados a partir de una técnica concreta, que compagina el respeto por el medio ambiente, la utilización de técnicas y procedimientos naturales, y la búsqueda de protección de nuestra salud.
2. Son sostenibles y respetuosos con la naturaleza.
Los productos de agricultura ecológica no generan residuos contaminantes, producen menos dióxido de carbono y requieren menos recursos para producirse.
Si tenemos en cuenta que para certificar los productos bio no se tolera el uso de pesticidas (que contaminan el suelo y alteran el ecosistema), y sólo se autoriza una cantidad mínima de aditivos, obtenemos alimentos naturales respetuosos con la fauna y la diversidad biológica que, además, repercuten positivamente en nuestra salud.
3. Pero, ¿realmente es más beneficioso consumir productos ecológicos que productos convencionales?
Intentaremos despejarte la incógnita. Para ello suma las ventajas anteriores al hecho de que los productos ecológicos contienen más vitamina A (β-Caroteno), C y E, mayor contenido mineral que los productos convencionales, y menor cantidad de metales tóxicos y pesados.
Estos datos no los ponemos aquí porque sí sin habernos informado y contrastado la información, expertos e investigadores en agricultura y nutrición garantizan estos beneficios
4. Control exhaustivo para garantizar la procedencia de los productos.
Para garantizar la procedencia ecológica de los productos se utilizan los sellos de acreditación ecológica.
Existe un reglamento comunitario [(CE) 834/2007] de obligado cumplimiento, en el que se recogen las normas de producción, elaboración y distribución de alimentos ecológicos, controlados año a año a través de auditorías a los operadores inscritos.
En España, las competencias sobre el control de la producción y etiquedato de los productos, está cedida a las comunidades autónomas, aunque es requisito obligatorio que todos ellos posean el sello europeo.
Fuente: Comisión Europa
¡Fíjate bien en el etiquetado, es fundamental para la comercialización de los productos!
Somos lo que comemos.-