8 beneficios de comprar y consumir alimentos ecológicos.
La semana pasada, como sabéis estuve en La Huerta Natural, una huerta ecológica situada en Alhaurín de La Torre que cultiva y promueve productos orgánicos y ecológicos. Esto me hizo pensar que aún no os había hablado en el blog de los alimentos bio o ecológicos.
Es indudable que una de las principales preocupaciones actuales en nuestra sociedad es la de alimentarse bien para gozar de una mejor salud. De ahí que la producción y venta de alimentos ecológicos haya aumentado tanto en los últimos año, incluso durante los años más acusados de la crisis económica, por la mayor demanda de estos alimentos por parte de los consumidores.
8 beneficios de comprar y consumir alimentos ecológicos.
¿Qué son los alimentos ecológicos?
Los alimentos y productos ecológicos u orgánicos son todos aquellos que se cultivan, crían y procesan de forma natural, es decir, sin el uso de químicos, fertilizantes, aditivos o conservantes en cualquiera de sus etapas de fabricación., esto les proporciona unas cualidades y ventajas que pasamos a detallar.
8 beneficios de comprar y consumir alimentos ecológicos.
1. Son más saludables. Los productos ecológicos son más saludables ya que están libres de los residuos tóxicos procedentes de pesticidas, antibióticos, fertilizantes sintéticos, aditivos y conservantes que se utilizan en la agricultura convencional y que a medio o largo plazo pueden dañar nuestro organismo.
2. Son mejor asimilados por nuestro organismo. Al no contener substancias artificiales, son asimilados más fácilmente por nuestro organismo. Los especialistas en nutrición aseguran que gran parte de las enfermedades degenerativas tienen su origen en la alimentación. Los alimentos ecológicos no contienen aditivos de síntesis que pueden provocar problemas en la salud tales como insuficiencias cardíacas, osteoporosis, migrañas y hiperactividad.Por otro lado, diferentes estudios han demostrado que no es imprescindible la incorporación de estas sustancias de síntesis en el cultivo o producción de alimentos ni en su conservación posterior.
8 beneficios de comprar y consumir alimentos ecológicos
3. Son más nutritivos. Otra característica de la agricultura ecológica es que, al cultivar los alimentos en suelos equilibrados por fertilizantes naturales, los productos son más nutritivos ya que contienen unos niveles más altos de vitaminas: especialmente vitamina C, proteínas, minerales esenciales como calcio, magnesio o hierro, y antioxidantes que ayudan a prevenir determinadas enfermedades como el cáncer.
4. Son más sabrosos. Los productos ecológicos, al ser elaborados de forma más artesanal y sin aditivos, recuperan su sabor original. Debido a que las plantas son únicamente fertilizadas orgánicamente, éstas crecen más sanas y se desarrollan mejor conservando el auténtico aroma, color y sabor. Por ello, muchos consumidores prefieren alimentos ecológicos, ya que conservan el verdadero gusto de cada ingrediente y les permite recuperar el sabor tradicional de los alimentos.
5. Su aporte nutricional es mayor. Los alimentos ecológicos proporcionan un aporte nutricional más completo que los convencionales proporcionando un organismo más saludable y resistentes a enfermedades. Los alimentos ecológicos contienen entre un 40% y un 60% más de vitaminas y minerales que los productos convencionales y menos porcentaje de agua, es decir, poseen un contenido en nutrientes muy superior al de los productos convencionales. Aunque otras fuentes científicas sostienen que no hay mayor aporte nutricional en los alimentos cultivados biológicamente, en Diesalud, desde nuestra posición de expertos en alimentación, aconsejamos consumir este tipo de cultivo tanto por nuestra salud como por la del planeta, tal como apuntamos en el punto siguiente, el cuidado de la naturaleza.
6. Son respetuosos con la naturaleza. Respetar el medio ambiente es una de las máximas de la producción orgánica. Cuando consumimos alimentos de cultivo ecológico colaboramos en la conservación del medio ambiente y evitamos la contaminación de la tierra, el agua y el aire.
La disminución de la diversidad biológica es uno de los principales problemas ambientales de la actualidad: la agricultura orgánica preserva las semillas para el futuro, impidiendo, de este modo, la desaparición de algunas variedades de gran valor nutritivo y cultural. Además la agricultura ecológica fertiliza la tierra y frena la desertificación, favorece la retención del agua y no contamina los acuíferos, respeta los ciclos naturales de los cultivos, evitando la degradación y contaminación de los ecosistemas, potencia la fertilidad natural de los suelos y recicla los nutrientes incorporándolos de nuevo al suelo como compost o abonos orgánicos. Los cultivos ecológicos respetan el equilibrio de la naturaleza contribuyendo a la preservación del ecosistema y al desarrollo rural sostenible.
8 beneficios de comprar y consumir alimentos ecológicos
7. Son más respetuosos con el bienestar animal. Las granjas ecológicas se caracterizan porque en ellas los animales crecen a su ritmo natural y en unas condiciones de vida adecuadas. El reglamento europeo contempla medidas específicas para la ganadería ecológica en lo que respecta a la habitabilidad en las granjas con el objetivo de evitar el estrés de los animales y potenciar el crecimiento en semi libertad. En ellas los animales no son manipulados artificialmente o de manera intensiva para lograr una mayor producción, ya que, entre otros aspectos, no se practica la inseminación artificial ni se emplean hormonas.
La alimentación de estos animales está basada en pastos naturales, leche preferiblemente de su propia madre, y piensos y forrajes ecológicos, exentos de pesticidas, fertilizantes y transgénicos.
Otra característica de la ganadería ecológica es que potencia las variedades autóctonas, por lo que la producción de alimentos ecológicos no sólo influyen en el desarrollo social, sino también en la preservación de las especies animales.
8. Fomentan el desarrollo sostenible. Quizás esta sea la mayor contribución de los alimentos ecológicos, que no impulsan acciones aisladas, sino que forman parte de un nuevo modelo de consumo y producción en el que el cuidado del medioambiente es una prioridad y se crea conciencia entre los consumidores de su importancia.
El proceso de elaboración de un alimento ecológico es mucho más lento que el de uno tradicional porque los ciclos naturales no se alteran, lo cual implica mayor mano de obra. Si bien esto se nota en el precio de un alimento ecológico, que es ligeramente superior al del resto de alimentos, estos procesos contribuyen al desarrollo de las regiones y los entornos donde se producen, por lo que cuando consumes alimentos ecológicos estás realizando un consumo responsable y contribuyendo al desarrollo social.
Además la producción de estos alimentos está creciendo tanto que la diferencia de precio con los alimentos no ecológicos es cada vez menor y en cualquier caso, lo poco de más que pagamos es por un producto mucho más saludable y de una calidad mayor.
Cada año la valoración de estos productos por parte de los consumidores y la producción de este tipo de alimentos aumenta ya que además de poseer mayor valoración nutricional, dan respuesta a algunas de las preocupaciones más relevantes de nuestra sociedad: la salud, las cuestiones ambientales, el uso de pesticidas o el bienestar de los animales.
Esperemos que tanto la producción como su consumo sigan creciendo. Desde Diesalud os animamos a consumir este tipo de productos, vuestro organismo os lo agradecerá y lo notaréis.
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