Quise hacer un post dedicado a este día: El 10 de Octubre en donde se celebra el día mundial de la Salud Mental y que a pesar de vivir en un mundo moderno, aún existen tabúes respecto a tener alguna enfermedad o trastorno mental*, o quizás algún desequilibrio menos grave en tus pensamientos y/o emociones. Y es que la influencia y el ajetreo del ritmo de vida actual que producen ansiedad y estrés, el hecho de tener condiciones hereditarias, entre otros, son factores que hacen más propenso el padecer alguna clase de trastorno, en otras palabras los desórdenes mentales son producto de una compleja interacción entre factores biológicos, psicológicos y sociales.
Ahora bien hay que aprender a diferenciar entre “salud mental”** y “condiciones de salud mental”. Los diccionarios de la Merriam-Webster definen la salud mental como “Un estado de bienestar emocional y psicológico en el cual el individuo es capaz de hacer uso de sus habilidades emocionales y cognitivas, funciones sociales y de responder a las demandas ordinarias de la vida cotidiana”; mientras que las condiciones de salud mental se refieren “Al estudio de enfermedades mentales y al tratamiento médico posible y consecuente”.
Por lo que teniendo estas definiciones, entendemos que no es lo mismo una crisis que pudiera aparecer en una edad determinada, que una enfermedad mental como tal que quizás te acompañe de por vida, y que además de una terapia psicológica deba acompañarse de una terapia medicinal, sin embargo si considero en que si una crisis no es resuelta en el momento apropiado, puede desencadenar un trastorno que sin el debido tratamiento, se agrave cada vez más con el pasar del tiempo.
Y es que así como se enferma el cuerpo, también se enferma la mente, y las enfermedades mentales son iguales o incluso pueden ser peores que las físicas, y es importante que se traten como tal, es así como si te diagnosticarán diabetes y tengas que ir al médico y tomar medicina regularmente, es lo mismo si te detectan un trastorno mental y tengas que acudir al psicológo y/o al psiquiatra, dependiendo del grado o severidad de la misma.
Como ya lo mencioné, estamos expuestos de forma continua a muchas situaciones que nos provocan tensión, ansiedad, depresión, y un sin número de emociones negativas, y lo más importante es que si nos encontramos en dichas situaciones, las reconozcamos y tratemos de liberarnos de ellas, y si no podemos enfrentarnos solos, entonces busquemos ayuda.
Aprender a conocer el estado de tu salud mental y cuidar de ella, conocer tus capacidades así como tus miedos, tus deberes y derechos, tus relaciones contigo mismo y con los demás, practicar el desapego emocional y recordar que la persona que siempre estará contigo serás tú mismo y tu mente se puede convertir en tu mejor o no tan mejor amiga, son acciones que debemos tomar en cuenta para cuidar nuestra salud mental.
Así que ¡Salud! Y qué esperas si consideras que necesitas buscar ayuda, hazlo ya y que nadie minimice tus padecimientos psicológicos. Tienes derecho a cuidar de tu mente y de tu cuerpo.
* Enfermedad mental: Una amplia variedad de afecciones que afectan el estado de ánimo, el pensamiento y el comportamiento.
**Expertos coinciden en que "salud mental" y "enfermedades mentales" no son dos conceptos opuestos, es decir, la ausencia de un reconocido desorden mental no indica necesariamente que se tenga salud mental.