Además, es una suerte contar con tantos pescados diferentes que nos ofrecen ricas recetas. Si hablamos de temporada, ahora podemos destacar el besugo, por ejemplo. Cuenta con vitaminas del grupo B como las B3, B6 y B12. Estas vitaminas son buenas para el funcionamiento del sistema nervioso y del sistema de defensas. En cuanto a su contenido en minerales, el besugo contiene minerales como el fósforo, el magnesio y el hierro.
El besugo es un pescado de invierno que puede verse en muchas cenas navideñas, gracias a su excelente sabor y propiedades nutricionales como hemos comentado anteriormente.
Entre los pescados azules, hay varios de temporada, como el bonito del Norte, una excepcionalidad que constituye la base de muchos platos y recetas tradicionales de algunas regiones españolas. Llama la atención por sus ácidos grasos omega-3, los cuales son buenos para fortalecer el organismo, luchar contra el colesterol y proteger el corazón. Vamos, esencial para llevar una vida mucho más saludable.
¿Una dorada al horno? es una receta especial que suele reservarse a las ocasiones también más especiales. Las Navidades englobarán algunos de estos platos con pescados, pues las doradas están muy buenas y llevan algunos minerales como el sodio y el sodio, además de hierro.
La caballa es otro de los pescados azules más preciados. Y, en este caso, además, es un pescado que podemos encontrar varios meses, como en diciembre. Aporta una gran cantidad de nutrientes y lo podemos encontrar en lata o bien para cocinar.