La cefalea tensional es uno de los dolores de cabeza más comunes entre la población, además, se manifiesta también como dolores o molestias en el cuero cabelludo o en el cuello, y se produce principalmente como consecuencia de la tensión de los músculos de estas zonas.
Puede aparecer a cualquier edad, aunque es más común que aparezca durante la adolescencia y la edad adulta. Además, se considera crónica cuando el dolor aparece al menos un par de veces por semana durante varios meses.
Una de las principales causas de que una cefalea se vuelva crónica puede ser el tratamiento deficiente o excesivo de un dolor de cabeza primario, luego hay que evitar estas situaciones.
Causas
Las contracciones musculares que provocan estos dolores de cabeza pueden ser causadas por muchos motivos, siendo los más comunes el estrés, la depresión, un traumatismo en la zona y, por supuesto la ansiedad. Pero no sólo se deben a estas causas, también puede provocar esta cefalea algunas actividades en las que se permanece durante mucho tiempo en una misma posición, como por ejemplo cuando se está delante de un ordenador durante largas horas. Asimismo, dormir en una habitación fría o con el cuello en una mala posición puede ser motivo de la aparición de este tipo de dolor de cabeza.
Cabe destacar también entre sus causas:
Consumo de alcohol.
Exceso de consumo o abstinencia de cafeína.
Resfriados y gripes.
Problemas dentales.
Tensión ocular.
Abuso del tabaco.
Fatiga.
Síntomas
Los síntomas que presenta una cefalea tensional son muy similares a los que manifiesta cualquier dolor de cabeza con algunas diferencias: presión en la zona, dolor generalizado (no sólo en un punto) y más fuerte en el cuero cabelludo, las sienes, la nuca y, en algunos casos, los hombros.
Estos síntomas pueden presentarse tanto como un episodio aislado, como de manera constante y casi diaria. Pueden durar entre horas y días siendo muy molesto e incluso incapacitante.
Tratamiento
El tratamiento de la cefalea tensional está enfocado a tratar lo síntomas principalmente, pero también a prevenir la reaparición del dolor de cabeza. Para lo primero, lo más recomendable es el uso de fármacos que pueden abarcar desde analgésicos de todo tipo hasta relajantes musculares si el médico así lo creyera oportuno.
Para prevenir su aparición, en cambio, existen muchas más alternativas como, por ejemplo, la ingesta de medicamentos como los inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS) o los antidepresivos tricíclicos que, aunque están destinados principalmente a tratar la depresión, pueden ser de gran utilidad en estos casos.
Asimismo, se ha comprobado cómo inyectando toxina botulínica, popularmente conocida gracias a la marca Botox, en zonas específicas del rostro se pueden evitar en muchos casos estos molestos dolores de cabeza.
Consejos útiles
Sin embargo, en la mayoría de casos no es necesario recurrir al tratamiento farmacológico para prevenir la aparición de las cefaleas tensionales. En ocasiones, es suficiente con seguir unos buenos hábitos y cambiar algunas malas costumbres:
Aprender a manejar y controlar el estrés y, si es necesario, practicar terapias de relajación como el yoga, por ejemplo.
Cambiar la almohada o intentar dormir en una postura diferente a la habitual.
Asegurarse de mantener una buena postura durante la realización de actividades como la lectura o mientras se está utilizando un ordenador.
Ejercitar el cuello y los hombros con regularidad cuando se esta realizando actividades en una misma posición durante mucho tiempo.
Si el dolor de cabeza está asociado al frío, es importante combatirlo haciendo que nuestro cuerpo se mantenga en una temperatura agradable.
Dormir y descansar las horas suficientes.
Practicar algún tipo de deporte ya que ayuda a liberar tensiones y a relajar los músculos.
Cabe destacar que si sientes que esta molestia va empeorando o que se extiende más días de lo que parezca normal lo ideal es consultar a tu médico para que así se administre un tratamiento adecuado y evitar alguna complicación que genere como consecuencia un riesgo de gravedad apara tu salud.
Fuente: Medline Plus.
Imágenes (por orden de aparición): Patrick Denker/Flickr, jazbeck/Flickr, danabooo/Flickr, Dominique Godbout/Flickr y lululemon athletica/Flickr.