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Estamos de lleno en la época de los resfriados y la gripe, el frío ha llegado definitivamente a la península, y los virus proliferan a sus anchas. En la familia ya hemos caído prácticamente todos, en más o menos grado. Hace un par de semanas fui yo la que se pasó 4 días sin poder levantarse de la cama.
Muchas veces es inevitable pillar estos resfriados, pero podemos prevenir o ayudar a nuestro sistema inmunológico para que haga resistencia de forma más efectiva a estos periodos de resfriados, dolores de gargantas y narices congestionadas.
El resfriado común (leve) te deja molestias, malestar general, pero no te impide llevar una vida normal.. eso sí, fastidiar, fastidia. No tiene cura, simplemente se alivian los síntomas, y remite poco a poco.
Para mantener un sistema inmune fuerte tenemos que cuidarnos: estar tranquilos, evitando el estrés, con una alimentación equilibrada y una vida activa. Vamos, algo básico y que debemos hacer todo el año.
Ideas para prevenir el resfriado
El 80% de nuestro sistema inmunológico está en nuestro sistema digestivo, por lo que cuidarlo es básico para mantenerlo sano. Una alimentación sana, equilibrada y rica en nutrientes es lo que necesitas para cargar de energía a tu cuerpo.
Antioxidantes y vitamina C. Alimenta a tu cuerpo con los nutrientes que necesita, para asegurarte que tiene energía suficiente para que tu sistema inmune trabaje al 100%. La fruta fresca y los vegetales de hoja verde son ricos en antioxidantes, minerales y vitaminas. Prueba con smoothies para tener una buena dosis de vitaminas (por ejemplo: kale + manzana + limón + perejil, o zanahoria + remolacha + apio + jengibre + limón + perejil)
Haz ejercicio suave, realiza ejercicios de respiración profunda para aliviar el estrés.
Duerme y descansa lo que te pida el cuerpo
Mantente caliente, con ropa adecuada y con alimentos y bebidas calientes. Las bebidas calientes te ayudan a mejorar la digestión, el metabolismo y ayudan a eliminar toxinas.
Limpieza. Con tantos virus rondando a la gente, es más que recomendado mantener una limpieza (especialmente de manos, cuando vienes de sitios públicos) para reducir el riesgo de infección.
Vitamina D. En invierno es más complicado tener una buena dosis de vitamina D por parte del sol, por el mal tiempo y las pocas horas de luz, así que intenta aprovechar al máximo las que puedas. Además, puedes tomar alimentos ricos en vitamina D (pescados y órganos animales) o tomarlo mediante suplementos (consúltale al médico primero). Un déficit de vitamina D te hace sentirte más cansado y débil, entre otros problemas.
Ideas para aliviar el resfriado
Si no has podido evitarlo y el resfriado te ha pillado de lleno, puedes ayudar a aliviar los síntomas con productos que normalmente tenemos por casa. No soy defensora de eliminar los médicos, ni mucho menos, de nuestras vidas. Pero para aliviar los síntomas de un resfriado común prefiero probar remedios naturales, primero. Estos remedios suenan a La botica de Txemari, pero son sabiduría popular.
(Atención: como indico, son remedios naturales para aliviar los síntomas de un resfriado leve. Si tienes fiebre, tos intensa u otros problemas, no dejes de ir al médico. Un profesional siempre te aconsejará mejor que cualquier página de internet. No seas cabezahueca)
Miel: la miel es un antiséptico natural, ayuda a combatir las infecciones y suaviza mucho la garganta, aliviando la tos seca. Puedes tomarla directamente o con un poco de zumo de limón.
Baños calientes o vapor: el vapor ayuda a suavizar las vías respiratorias congestionadas, lo que facilita el soltar flemas. Añade unas gotas de aceite de eucalipto para descongestionar -a parte de dar buen olor-.
Infusionar pimienta negra (1 cucharadita) y miel (2 cucharaditas), durante 15 minutos. Esta infusión mejora la circulación en general, lo que ayuda a descongestionar la nariz, y la miel, como ya hemos visto, es un alivio para la tos.
Infusión de tomillo. En esta entrada te conté cómo uso yo esta infusión y lo bien que me sienta. Es antiinflamatoria y relaja los músculos (ayuda a calmar la tos). Su sabor no es especialmente bueno, pero me resulta muy eficaz y recurro a ella cuando tengo anginas o mucha tos.
Beber mucho (...pero agua, ¿eh?). La hidratación ayudará a eliminar poco a poco la mucosidad. Además las bebidas calientes te mantienen calentito y son agradables.
Infusiones de jengibre. Tiene propiedades antihistamínicas y antiinflamatorias. Puedes hacer infusión solo de rodajas de jengibre o añadirle zumo de limón y miel.
Manzanilla: Tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que también nos ayudará con los dolores de garganta. Una infusión es la mejor manera de tomártelo.
Ajo crudo. El ajo contiene alicina (lo he buscado, no me lo estoy inventando), que es antibacteriano. La forma más directa y efectiva para tomarlo es metiéndote un diente de ajo en la boca y chuparlo como si fuera un caramelo, mordiéndolo de vez en cuando para que suelte la alicina. Pero claro, esto es algo que no todo el mundo quiere hacer. Una forma, menos efectiva, pero que también ayudaría, es añadir simplemente un poco más de ajo a la comida.
Hacer gárgaras con agua con sal (o bicarbonato). Un vaso de agua tibia y media cucharadita de sal, remueve hasta disolver, y mediante sorbos, vamos haciendo gárgaras con ello, cada dos o tres horas. La sal ayuda a descender la inflamación y a soltar el moco.
Estos son algunos de los remedios que conozco, y que utilizo cuando comienzo a tener molestias de garganta o un poco de tos. En casa me dicen que soy la hierbas, pero mira, funciona.
Seguro que tú conoces algún remedio de tus abuelas que también se usa /usaban en estos casos ¿lo compartes?
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