¿Te has preguntado alguna vez qué es la inflamación alimentaria? ¿Conoces sus causas, sus síntomas y sus consecuencias? Aunque a priori este concepto pueda parecerte desconocido, son muchos quienes lo conocen como “intolerancia alimentaria”.
Es por ello que, entre sus principales consecuencias, destacan los dolores de estómago, los picores en la piel, las malas digestiones, las molestias musculares y los dolores de cabeza, principalmente.
Cabe destacar, asimismo, que la inflamación alimentaria también puede agravar otro tipo de enfermedades como, por ejemplo, la artritis, los trastornos digestivos, la dermatitis, la migraña y la hipertensión arterial.
Ingredientes que pueden provocar la aparición de la inflamación alimentaria
A pesar de que existen multitud de alimentos que pueden traer consigo la aparición de inflamaciones y alergias alimentarias, este tipo de trastornos suelen aparecer tras el consumo de:
Productos lácteos, tales como la leche, los yogures, los quesos y las cuajadas.
Levaduras: el pan, los cereales, el vinagre, la cerveza y el vino también pueden ser causantes de las inflamaciones alimentarias.
Alimentos ricos en sal, lo que hace que sea fundamental limitar la ingesta de este ingrediente y consumir un máximo de cuatro gramos al día, tal como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Embutidos y fiambres.
Los aceites cocinados presentes en los cereales integrales, la carne, las patatas o los frutos secos, por ejemplo.
Ingredientes que contienen trigo, entre los que podemos destacar productos como la harina, el pan, las salsas, los preparados para postres y el pan rallado.
Productos ricos en níquel, una sustancia que está presente en el chocolate, la lechuga, la cebolla, los guisantes, los mariscos, las pasas, las frambuesas, los frutos secos y las lentejas, entre otros ingredientes.
La solución a la inflamación alimentaria
En la actualidad es posible combatir los síntomas propios de la inflamación alimentaria de un modo práctico y sencillo, ya que existen diversos test que permiten saber qué alimentos están provocando la intolerancia y las molestias.
Una vez conocido este dato, es posible aplicar un tratamiento que, en la mayoría de ocasiones, no se centra en eliminar esos ingredientes por completo de la dieta, sino en introducirlos en la alimentación de forma gradual con el fin de conseguir que el organismo pueda llegar a tolerarlos.
¿Qué opinas sobre este post en el que te explicamos qué es la inflamación alimentaria y cuáles son sus causas y consecuencias?