El inicio del día es crucial para muchas de nosotras, el crear una buena mañana ayuda a que nuestro estado de ánimo sea mejor y que podamos disfrutar el resto del día de una buena manera.
Para ayudar a que esto suceda te tengo algunas posiciones de yoga, que podrás hacerlas al despertar para poder oxigenar tu cuerpo, tu mente y tu espíritu; haciendo meditación y trazando objetivos.
No es necesario el tener mucha experiencia, lo divertido de estas posiciones es que seas principiante o avanzada los puedes hacer y notarás una diferencia significativa conforme pasan los días.
Es recomendable que uses un tapete para que sea más cómodo y que las primeras veces que hagas estos estiramientos sean en el orden que te los voy a dar. Después de varias veces de hacerlos podrás tú decidir cuales te hacen sentir mejor y en que orden los prefieres.
1. Postura de la montaña
Para esta postura es necesario que te encuentres de pie, con los hombros relajados, tus manos hacia abajo con las palmas viendo hacia enfrente. Vas a inspirar todo lo que puedas y sentirás como se infla el pecho y las costillas se abren ligeramente, mantendrás unos segundo y después exhalas lentamente hasta sacar todo el aire. Un error muy común es que no te encuentres derecha, es necesario que tomes una postura en donde tu columna este en línea recta.
2. Postura de la silla
Para esta postura es necesario empezar estando de pie y con tu espada recta. Tus pies se los separas a la anchura de tu cadera. Después levantarás los brazos a la altura de tus orejas, las palmas de tus manos viendo hacía al frente. A continuación flexionarás un poco tu piernas como si fueras a sentarte en un silla. Un error muy común es que al momento de flexionar las piernas, la espalda ya no es recta. Es necesario cuidar que no se mueva la parte de arriba. Otro error es que las rodillas excedan tus pies al momento de flexionarlas. Para esta posición el apretar el abdomen y el concentrase en tu respiración ayudar mucho a poder ejecutarla.3. Postura de perro hacia abajo
Con forme vamos pasando de posiciones son un poco más complejas, todo lo puedes hacer no importa tu nivel de experiencia, pero es necesario que te encuentres concentrada para poder sacarle el mejor provecho. Para esta siguiente posición, te colocarás en 4 puntos, estando tus manos y tus pies a la misma anchura y tomando de referencia la cadera. Llevarás tu cadera hacia arriba, con esto tu cuerpo simulará un triángulo o una ¨V¨ invertida. Respirarás unos segundos en esa posición, los ojos tienen que mirar entre las piernas y con las manos te impulsarás para adentro, como si quisieras pegar tu frente a la cadera. No es necesario que las rodillas estén completamente estiradas, pueden estar ligeramente flexionadas.
4. Posición del guerrero 1
Estando en posición del perro hacia abajo, pondrás adelante el pie derecho entre tus manos. El talón izquierdo estará alineado a la altura de tu talón derecho. Y sin mover los pies de esa posición te incorporarás hacia arriba. Ahora flexionarás la pierna derecha haciendo que la cadera hacia delante y tirando las costillas hacia adentro. Levanta los brazos y mantente erguida. Enfócate en tu respiración por unos segundos. Esta posición fue descrita solo para el lado derecho, es necesario repetirlo con la pierna izquierda enfrente y la pierna derecha en la parte de atrás.
5. Posición del guerrero 2
Partiendo de la posición del guerrero 1; los pies no se moverán. Lo único que cambiarás es la parte de arriba; colocando los brazos en direcciones opuestas y paralelos al suelo; la cadera la vas a rotar hacia la izquierda.
6. Postura del niño
Para esta postura es necesario empezar arrodillada con las puntas de los pies tocándose. Bajarás el tronco hacia el piso con tus brazos estirados, la cintura la tratarás de bajar hacia los tobillos y la frente tratarás de que toque el suelo. Respirarás y te concentrarás por unos segundos. Un error que puede suceder es que te tenses mucho del área de los muslos o de los hombros; es necesario que te relajes y te estires lo más posible.
7. Postura del perro hacia arriba
Esta última postura es necesario empezar en una posición acostada boca abajo. Los pies deben estar completamente estirados, tu empeine debe de estar tocando el suelo. Colocarás tus plantas de las manos en el suelo haciendo con tu codo flexionado un ángulo de 90 grados. A continuación empujarás con tus manos y levantarás el pecho del piso y la mirada hacia el cielo. Estírate todo lo que puedas y mantente así. Respira hondo y concéntrate.
Con estos ejercicios podrás hacer que se oxigene el cuerpo y la mente de manera correcta, para poder así empezar tu día de la mejor manera.
Recuerda compartirme tu experiencia y tus avances. Te espero en mi próximo post