Una buena alimentación contribuye a la buena salud” Esto lo hemos escuchado muchas veces. Pero los que optan por la nutrición energética consideran la comida como algo más que indispensable para una buena salud. La nutrición energética no es una dieta moderna, más bien es un estilo de vida que todas las personas deberían seguir si quieren alcanzar un óptimo estado de salud. Los principios en los que se basa la nutrición energética nos ayudarán a alimentarnos con sentido y con propósito.
Antes de seguir leyendo comparto este vídeo del Doctor Perez Calvo.
¿Qué es la nutrición energética?
De acuerdo con Paula Droguett , pionera en el campo de la nutrición energética, el fundamento de este tipo de alimentación considera que la energía que contiene cada alimento produce un efecto en el cuerpo y que esa energía puede ser utilizada para que las personas alcancen un equilibrio entre la mente y cuerpo.
La nutrición energética no es una forma de medicina alternativa ni tiene nada que ver con lo esotérico, se trata de consumir alimentos principalmente de origen vegetal; aunque tampoco es ser vegetariano, porque tambien se deben incluir alimentos de origen animal como los huevos y el pescado.
Una vez que las personas ingieren los alimentos apropiados de la nutrición energética están consumiendo tambien la energía que estos poseían, así la comida pasa de ser una fuente de calorías que el cuerpo necesita a ser un instrumento terapéutico tan eficaz como un fármaco o remedio, agrega Droguett.
Efectos de la nutrición energética en nuestro cuerpo
Drenante: drenan todos los líquidos sucios que se encuentran en el organismo, también limpian las células.
Tonificante: aportan energía y tonifican, no solo los músculos sino el cuerpo entero.
Reequilibrante: reequilibran las funciones del organismo que se desequilibran cuando las personas tienen una mala alimentación y una carga emocional negativa provocando problemas de salud.
Clasificación de los alimentos en la nutrición energética
Según su naturaleza:
En este grupo los alimentos son clasificados de acuerdo al efecto térmico que producen en el organismo.
Los que pertenecen al Yin son fríos y frescos, de acuerdo con la tradición China estos tienen la capacidad de refrescar, hidratar y tonificar, por eso son útiles en caso de estrés, insomnio, inflamación etc.
Los que se encuentran en el Yang son en cambio tibios y calientes, lo que significa que pueden expandir su energía, calentar y facilitar el metabolismo, por eso son útiles en situaciones relacionadas con el dolor dental y reumático, fatiga y frio.
En el caso de los alimentos neutros, tienen propiedades para estabilizar, equilibrar y armonizar. A continuación te invito a ver las características de estos alimentos.
Fríos:
Azúcar, sal, cangrejo, pulpo, germen de trigo, algunas algas, yogurt, limón, sandia, plátano etc.
Frescos:
Pato, cerdo, conejo, lechuga, acelga, espárragos, manzana, pera, mora, fresa, naranja, mandarina, maíz, trigo, centeno etc.
Calientes:
Trucha, cordero, jengibre, ajo, pimienta, trigo sarraceno etc.
Tibios:
Anchoas, mejillones, gambas, pollo, tomillo, perejil, orégano, romero, café, vinagre, vino, melocotón, coco, avena, lichi, cerezas etc.
Neutros:
Pescado blanco, queso fresco, frambuesa, piña, mango, albaricoque, arroz, semillas de sésamo, lenteja, pipas de girasol, cebada, garbanzo etc.
Según su sabor:
el sabor y el color de los alimentos tiene relación con las emociones, de acuerdo a la tradición China el consumo excesivo de un alimento perteneciente a este grupo puede causar desequilibrio emocional.
Dentro de la medicina China las emociones se identifican con un sabor y un color especifico.
Alegría (amargo y rojo), decisión (ácido y verde), reflexión (dulce y amarillo), recuerdo (picante y blanco) y responsabilidad (salado y negro). Veamos la relación que existe entre el sabor del alimento y el organismo.
Salado:
Se relaciona con el riñón y la sangre y tienen la función de distribuir y absorber
Ácido:
Se relaciona con las articulaciones y el hígado y tienen una función purgativa y astringente.
Amargo:
Se relaciona con la función del colon y el corazón y tienen función purgativa, endurece, seca y concentran energía.
Dulce:
Tiene relación con el dolor muscular, sus propiedades son diuréticas y relajantes.
Picante:
Tienen efecto diurético y funcionan como dispersores.
Según su color:
Los colores de los alimentos se relacionan con los diferentes órganos: pulmones, riñones, corazón, hígado, bazo y con elementos de la naturaleza: agua, tierra, fuego, madera y metal. De allí la importancia de mantener una dieta multicolor con el fin de conseguir el equilibrio interno con la naturaleza. Veamos cómo se clasifican los alimentos de acuerdo al color y elemento de la naturaleza.
Alimentos blancos (metal):
Ajo, cebolla, coliflor, champiñones, nabo. Depuran y limpian el organismo y benefician la visión y pulmones.
Alimentos verdes (madera):
Brócoli, aguacate, espinaca, acelgas. Se relacionan con la vida y aportan grandes beneficios al hígado.
Alimentos negros (agua):
Sésamo negro, setas negras, pepino de mar, arroz integral. Tienen efecto positivo en la función de los riñones.
Alimentos rojos (fuego):
Pimientos, tomates, fresas y manzanas rojas. Sus beneficios se centran en el sistema inmunológico y el corazón.
Alimentos amarillos (tierra):
Piña, melón, pimiento amarillo, maíz. Tienen efecto beneficioso sobre el bazo.
Opinión de un experto sobre la nutrición energética
El Dr. Jorge Pérez-Calvo, experto en nutrición, especialista en medicina integrativa la cual es una combinación de la tradicional con la natural, explica que la nutrición energética es clave para la salud del hígado y la vesícula. En su libro “Nutrición energética para la salud de los 5 órganos principales” explica la relación que existe entre la salud hepática y el consumo de ciertos alimentos. En un lenguaje llano habla sobre los beneficios de aprender a alimentarse, lo cual nos permitirá disfrutar de mayor energía, armonía, conciencia y una mejor calidad de vida.
Refiriéndose a la vesícula y el hígado, muestra como estos órganos influyen en las emociones, el carácter y pensamiento, además muestra cómo usar estos conocimientos para tener una mejor salud, mejorar en el ámbito mental y emocional.
Como vemos, si queremos conseguir una buena salud no solo física sino mental y emocional es importante que demos atención a la combinación correcta de los alimentos, ya que estos pueden llenarnos de energías positivas que contribuirán a que mantengamos un estado de salud óptimo.
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Fuentes y referencias
https://www.jorgeperezcalvo.com/work/nutricion-energetica-para-la-salud-del-higado-y-vesicula
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