Investigaciones médicas recientes muestran que las personas que continuamente sufren la falta de sueño podrían enfrentar un riesgo adicional a la irritabilidad y fatiga durante el día, a largo plazo, el no dormir lo suficiente también aumenta el riesgo de sufrir problemas de salud graves como podrían ser los causados por la obesidad y la diabetes tipo II. Sobre éste último punto, agregan “La falta de sueño afecta la capacidad de las células grasas o adiposas para responder a la insulina” dice Matthew Brady, el autor principal del estudio y profesor asociado de medicina en la Universidad de Chicago, dicho estudio fue publicado en la revista Annals of Internal Medicine, el 16 de octubre de 2012.
Según resultados del estudio estiman que las células grasas, mismas que están relacionadas al almacenamiento y liberación de energía del organismo, de las personas que no duermen lo suficiente y sufren de falta de sueño, requieren aproximadamente casi tres veces más cantidad de insulina para activar la enzima conocida como AKT, que desempeña un papel crucial en la regulación del azúcar en la sangre. Si la resistencia a la insulina de este tipo se vuelve persistente, el azúcar y el exceso de colesterol, según estiman podría acumularse en la sangre, aumentando el riesgo de diabetes y enfermedades cardiovasculares.
Los especialistas recomiendan dormir un lapso de entre 7 y 9 horas al día. El dormir bien es unas parte preponderante del metabolismo energético del organismo, el no hacerlo, en opinión de los profesionales, solo incrementa el riesgo de afectar la salud, y es el propio tiempo el encargado tarde o temprano de cobrar la factura.
Para un mejor consejo para tu bienestar consulta a tu médico.