La manzana es una de las frutas que han estado en todo momento en el mundo de las dietas y la salud. Esta resulta imprescindible para todas esas personas que buscan mantener su peso gracias a sus bajas calorías (sólo 50 calorías cada 100 gramos). Pero, además, la manzana también ayuda a limpiar el sistema interno gracias a su fibra.
Varios estudios analizan la relación entre esta fruta con el descenso del colesterol, por lo que su consumo está recomendado para evitar enfermedades coronarias. Además de actuar sobre los ácidos grasos que se adhieren a las paredes de nuestro sistema circulatorio, la manzana también interviene en el proceso intestinal, ayudando a eliminar residuos del organismo.
Su aporte de pectina, una fibra soluble que favorece el tránsito intestinal, también desintoxica el cuerpo ayudando a eliminar metales nocivos como el plomo, mercurio y otras toxinas. Junto con esta fibra actúa la cistina, un aminoácido que elimina las toxinas del hígado y que hace de las manzanas sean un buen remedio contra las resacas y un alimento interesante para las personas con problemas articulares causados por el ácido úrico.
Así pues, podemos utilizar esta fruta en nuestro menú para ayudar a eliminar grasas, rebajar el aporte calórico y contribuir a limpiar nuestro organismo sin perder una pizca de sofisticación y sabor en nuestros platos.
¿Conocías todos estos beneficios? ¿Es la manzana una de tus frutas favoritas?
Imágenes: Manzanas Val Venosta