El objetivo de la relajación es reducir el estado de activación fisiológica, facilitando la recuperación de la calma, el equilibrio mental y la sensación de paz interior. Sus efectos afectan a la dimensión fisiológica, emocional, cognitiva y conductual.
El entrenamiento en relajación es un proceso de aprendizaje gradual para reducir la activación que permite afrontar las situaciones de una forma más eficaz. Sus efectos están mediados por el equilibrio del sistema nervioso autónomo y el control sobre los sistemas automáticos y hormonales del cuerpo.
Mediante la práctica de la relajación el sistema nervioso disminuye su actividad general y aumenta la concentración de neurotransmisores como la serotonina que induce sensaciones de tranquilidad y alegría lo que unido a la disminución del tono muscular induce la relajación muscular.
Una persona en estado de relajación experimenta:
Respiración tranquila, profunda y rítmica
Relajación muscular
Sensación de calor interno y cutáneo
Latido cardiaco rítmico y suave
Reducción del nivel de ansiedad
Mejoría de la percepción del esquema corporal
Sensación de paz y equilibrio mental
ENTRENAMIENTO EN RELAJACIÓN PROGRESIVA:
Fue desarrollada por Edmun Jacobson en 1939. Jacobson comprobó que tensando y relajando una serie de músculos, y percibiendo las sensaciones corporales que se producen, se eliminan por completo las tensiones y contracciones musculares. Esto induce un estado de relajación profunda.
Inicialmente se práctica con 16 grupos musculares durante 30-40 minutos y a medida que se va adquiriendo práctica se reduce la duración y el número de ejercicios pasando a practicar con cuatro grupos musculares (brazos, cabeza, tronco y piernas). Finalmente y con un nivel de práctica mayor se puede realizar un solo ejercicio que implique todo el cuerpo.
Procedimiento:
Posición
Consiste en tensar y relajar los diferentes grupos musculares tomando conciencia de las sensaciones que se producen en cada situación.
Fase de tensión: Debe notarse la contracción del músculo lo que facilita la percepción de las sensaciones asociadas a la tensión. La percepción de la tensión lleva a discriminar mejor la respuesta de relajación.
Fase de distensión: No hay que realizar esfuerzos activos, simplemente se permanece pasivo experimentando el alargamiento muscular que se produce al soltar rápidamente toda la tensión.
Pasos a seguir en la relajación progresiva
Consideraciones a tener en cuenta:
RESPIRACIÓN DIAFRAGMÁTICA:
Procedimiento:
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