La Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) son servicios hospitalarios que tienen como misión la recepción, observación y tratamiento por personal médico altamente especializado y dotado de material idóneo.
En primer lugar existen unas normas de vestuario, que estará compuesto al menos por:
Uniforme reglamentario
Calzas
Mascarilla
Guantes
Gorro
Dada la susceptibilidad de los pacientes a las infecciones, los sanitarios deberán estar uniformados con batas asépticas, que se renovarán cada vez que abandonen estas dependencias.
Las informaciones médicas de las UCI se les dan a los familiares siguiendo normas de este tipo:
Información pre‐ingreso. Se le ofrece al familiar cuando el intensivista, fuera de la UCI, decide ingresar a un paciente.
Al ingresar se le proporciona un folleto explicativo de lo que es la UCI, de por qué se ingresan los pacientes, de los médicos que los atenderán, del aparataje, del horario de visitas y de las informaciones médicas. Así mismo se les solicita que expresen las sugerencias que se le ocurran, para mejorar el servicio, etc.
Tras el ingreso el médico de guardia, una vez valorado el paciente, habla con los familiares para darle su primer informe sobre la situación del enfermo. Dos de ellos, pueden pasar, tras la primera asistencia, a ver a su allegado. Dentro de la UCI dejarán 2 o más teléfonos móviles (que se apuntan en la gráfica de cada enfermo) para poderlos localizar si fuese necesario.
Diariamente, incluyendo sábados, domingos y festivos, todo el equipo médico disponible, se sienta en torno a una mesa, en la sala de sesiones, y va informando, uno a uno, a los distintos familiares de todos y cada uno de los pacientes, sobre su evolución en las últimas 24 horas. También se responde sobre las cuestiones que deseen plantear.
Si el paciente empeora, sea la hora que sea, se llama a los familiares, para informarles del cambio en su situación y de las medidas a tomar.
Si fallece el paciente, se informa de inmediato a los familiares.
Siempre, antes de dar el alta, sus allegados son informados.
Cuando el paciente sale de la UCI en transporte intrahospitalario para pruebas de imagen como TAC, RNMN, quirófano, etc.‐ o se traslada a otro hospital ‐ Neurocirugía, Cirugía Cardiaca, etc.‐ la familia es puntualmente informada.
Los familiares, dos por enfermo –los que ellos decidan– pasan dentro de la unidad perfectamente equipados (bata, calzas), media hora por la mañana y media hora por la tarde. Si el paciente está en un box aislado la visita se hace guardando todas las medidas de asepsia establecidas.
Cuando exista alguna circunstancia especial que así lo aconseje (problemas psicológicos del paciente, despertar de un coma, etc.), el médico de guardia podrá indicar una o más visitas extras de los familiares, fuera de las horas estipuladas.
Existen Consentimientos Informados ( y de suspensión del consentimiento) para determinadas técnicas en UCI o intervenciones fuera de la misma, que el familiar, previamente informado, podrá firmar o negarse a hacerlo.
A los pacientes de la Unidad de Estimulación Cardiaca y a sus familiares, se les informa tanto en las consultas externas como cuando se decide implantar un dispositivo, así como antes y después de la intervención. Con los enfermos que pasan a UCI, tras el implante, se siguen las mismas normas que con el resto de los pacientes ingresados en la UCI.
A todos aquellos pacientes a los que se les ha implantado un marcapasos se les entrega una guía al alta, profusamente ilustrada, con la información que necesitan sobre el funcionamiento de este dispositivo sanitario y de cómo puede verse afectada su vida tras la implantación, así como otros consejos útiles para los portadores.
A los pacientes que se van de alta a sus domicilios (algunos implantados de marcapasos) se les da un Informe Clínico, con su historial médico, enfermedad actual, exploración, técnicas, evolución y conducta a seguir. Si el paciente es derivado a una planta de hospitalización, la Historia Clínica se envía con el paciente y con la evolución diaria, tratamiento, etc., al servicio médico receptor.
La enfermería, auxiliares, celadores, etc. también dan sus informaciones a familiares puntualmente. Es especialmente útil la del turno de noche, al salir (8 de la mañana), en la que cuentan a sus allegados cómo ha pasado la noche el enfermo.
Las primeras recetas, al alta, siempre le son proporcionadas. Se intenta que sean productos genéricos.
Una información sencilla y cálida, dada siempre que se precise, conforta a los familiares y evita la aparición de conflictos innecesarios, tanto para el médico, como para la institución y también para la propia familia.