Recuperar la chispa entre las dos personas es una labor que requiere la implicación y la voluntad de ambos. ¿Te gustaría saber los mejores consejos para tener una relación duradera? ?Quisieras que todos los días fueran San Valentín?
Cada relación es diferente
El amor puede surgir en cualquier lugar: en el trabajo, en la universidad, o incluso en la cola del mercado. Estas circunstancias condicionan los vínculos que mantienen la pareja.Existen relaciones cuya base se establece a partir de afinidades físicas, culturales, intelectuales o de ocio. Cada una de ellas se sustenta sobre pilares distintos. Sin embargo, en todas, el respeto y la comunicación serán claves para su continu idad.
Añade novedades
Evita la monotonía. Hacer cosas fuera de la rutina habitual previene que la cotidianeidad mate la atracción y, al mismo tiempo, proporciona nuevas perspectivas que resultarán muy positivas para que la llama siga viva.Sorprende a tu pareja con algo inesperado: una cena romántica, una tarde en un SPA, o un viaje relámpago. En este sentido, las relaciones sexuales son el termómetro que mide la pasión de la relación. En muchas ocasiones, el sexo se vuelve cotidiano. Por ello, sexólogos y psicólogos de pareja recomiendan introducir aspectos novedosos en las relaciones.
Cambiar de lugar puede ser divertido, a la vez que excitante. La cama es el sitio más cómodo que existe, pero, ?alguna vez habéis pensado lo romántico que podrían resultar las caricias en el campo bajo las estrellas? ?O, una bañera de agua caliente con velas y una botella de cava?
Fomenta la complicidad
¿Qué es la complicidad? Es un lenguaje que sólo la pareja conoce y que los mantiene unidos frente a terceros. Un gesto o una mirada bastan para conocer el estado de ánimo y las intenciones de la otra persona.Sin embargo, ser cómplice implica un conocimiento profundo del ser amado. Sólo los amantes realmente convencidos pro
curarán conocer a fondo la personalidad de su media naranja. De esta manera, sabrá lo que le gusta, y le ayudará a alcanzar lo que quiere.
Así pues, se alcanza un grado de confianza que permitirá que la relación evolucione favorablemente. Ambos integrantes deben tener su propio espacio para ellos mismos y la libertad necesaria para no sentirse absorbidos el uno por el otro.
Elimina las intoxicaciones en la comunicación
La relación también puede perder fuerza por las recriminaciones. Ningún ser humano es perfecto y todo el mundo debe aprender a convivir con los pequeños defectos de los demás.Estos aspectos negativos se proyectan, principalmente, en la comunicación. Ironías, mordacidad, celos, exigencias, e incluso malas palabras hacen que una relación se estropee. Una pareja sana destierra todos estos aspectos incluso antes de que surjan.
Por el contrario, lo ideal es establecer una comunicación abierta y sincera, en la que los intereses de cada uno lleguen a conciliarse.