Desde el senderismo a la bicicleta, la naturaleza se convierte en tu gimnasio ideal con el buen tiempo. Además, si te alejas de la playa, sueles contar con una ventaja añadida, y es que posiblemente encontrarás menos gente. Puedes elegir varios deportes según tus preferencias. Lo importante es que estés cómoda y te sientas a gusto. Alejarse de semáforos, cruces, coches y otros elementos típicos de ciudades y centros urbanos, hará de tu rutina de deporte algo más placentero y con menos distracciones.
Senderismo
Empezamos con lo primero que te viene a la cabeza si piensas en hacer deporte en la montaña: el senderismo. Se trata del deporte más sencillo y para el que necesitarás menos equipamiento: ropa cómoda, a poder ser que transpire y calzado cómodo, bien sujeto al pie para evitar rozaduras o caídas.
¿Sabías que el senderismo te hace más feliz? No, no es una broma. Así lo constata un estudio de la Universidad de Michigan (EE. UU.) y de Edge Hill, en Inglaterra, publicado en 2014. Los investigadores analizaron a casi 2.000 participantes de un programa que tenía como objetivo fomentar el senderismo como hábito saludable. Una de las conclusiones es que las personas que caminaban por la naturaleza tenían menos tendencia a la depresión y además el senderismo servía como antídoto al estrés. Así, más allá de los beneficios físicos, el senderismo esconde beneficios también para nuestra mente.
Bicicleta
¿Vives en una ciudad poco adaptada a la bicicleta? Quizá las vacaciones son el momento oportuno para recuperar este hábito de los veranos de tu infancia. Pasear en bicicleta por la naturaleza es sinónimo de verano y además, estarás fortaleciendo tus extremidades y mejorando tus reflejos.
Si durante el año practicas spinning, te resultará más sencillo subirte a la bicicleta en verano. Además, no perderás el ritmo y podrás volver en septiembre a tus clases, sin haber perdido la forma.
Yoga
Un prado en las alturas con vistas puede convertirse en tu lugar favorito para practicar yoga. Y es que, como te recomendamos en otro post, el yoga al aire libre es otra posibilidad que tienes de hacer ejercicio en plena naturaleza.
Carrera
Si necesitas más acción, siempre puedes aprovechar las cuestas de la montaña para hacer carreras a un ritmo intenso durante unos minutos e ir intercalando con carreras a un ritmo más suave. De esta forma, fortalecerás todos los músculos de tus piernas y mejorarás la flexibilidad de las articulaciones.
Como ves, las opciones dependen de ti, de tus aficiones y de tus hábitos deportivos. Aun así, elijas el deporte que elijas, recuerda que es muy importante que calientes los músculos antes de empezar a entrenar. De la misma forma, los estiramientos al finalizar el ejercicio deben ser una parte fundamental de cualquier rutina deportiva.
¿Has pensado ya dónde vas a hacer ejercicio durante tus vacaciones?