El dia de hoy estaremos hablando de cuales son los beneficios del queso, actualmente existe una gran controversia respecto al consumo de lácteos. Unos lo encuentran beneficioso para nuestra salud, sin embargo, son muchas las voces que lo critican. Aun así, el debate está abierto y seguimos sin encontrar una respuesta clara.
Por una parte, encontramos expertos que apoyan el consumo, alegando que es una forma muy rentable de obtener calcio, imprescindible para nuestra dieta, y que, además, aporta vitamina D, proteínas, hidratos de carbono y grasas.
Por otra, los críticos explican que el consumo de productos lácteos trae consigo problemas como alergias o asma y enfermedades tan graves como el cáncer de próstata u ovarios. Además, defienden que los mamíferos, cuando son adultos, dejan de consumir leche.
Sea cual sea la postura correcta, lo que si está claro es que consumir calcio es imprescindible para nuestra salud, pero existen otros productos no lácteos que nos lo proporcionan, como son: las verduras de hoja verde, los frutos secos, los pescados azules, las legumbres u otro tipo de 'leches' como la de soja, almendra o arroz. La leche no debe ser el pilar de nuestra alimentación y es prescindible.
Dentro de los productos lácteos como son el yogur, el kéfir, la mantequilla o el queso, encontramos que este último tiene propiedades que son muy buenas a la hora de entrenar.
Por sus características, el queso no es el mejor alimento para tomar antes de entrenar, ya que, sus calorías provocan una digestión lenta, sin embargo, sí que lo es en términos de recuperación.
Esto se debe a que la caseína, su principal proteína, libera una buena porción de aminoácidos al torrente sanguíneo, lo que produce un menor daño durante el ejercicio y una mejor recuperación. También se caracteriza por ser anti-catabólica, evitando que se destruya el tejido muscular y nutriéndolo durante horas.
Sin embargo, no todos los quesos valen. Debemos descartar los curados, debido al elevado porcentaje de proteínas. Los más adecuados son los quesos tiernos y frescos, aunque la mejor opción es el requesón o cotagge. Esto se debe a su bajo contenido en calorías y grasa, y al gran contenido en caseína y calcio.
Se recomienda acompañar el queso con alimentos que aporten, principalmente, hidratos de carbono para complementar sus nutrientes y no consumirlo muy próximo a la práctica de ejercicio.
Un ejemplo de comida o cena sería una ensalada de pasta o de arroz con un poco de queso de Burgos o requesón y, para los snacks, la opción ideal es combinar un trozo de queso con alguna fruta, membrillo o barrita de cereales.
Y aquí nuestro pequeño truco para recuperar el tono después de hacer ejercicio. Esperamos que a ti también te haya servido.