¡Buenas artefiliáticos!
Volvemos de nuevo a las andadas…. como ya os dije tiempo atrás, la próxima entrada a nuestro blog iba a estar inspirada en la profunda niebla.
Como siempre, os preguntaréis ¿y por qué razón?, pues muy sencillo…
En muchas ocasiones, nos habremos sentido como que una espesa, abundante y fría niebla nos envuelve. Cada uno atribuirá un valor diferente para dicho fenómeno atmosférico tan rutinario y a la vez tan extraño.
Como ya sabéis, mis entradas son puras metáforas y probablemente dicho tema te recuerde a algo en especial: Un problema en concreto, un examen, una situación estresante, un duelo e incluso una inestabilidad emocional.
¿Sabes a lo que me refiero verdad?
Siguiendo el hilo de la conversación, la espesa niebla cuando nos domina y nos hace estar en el centro de ella, nos impide ver más allá de donde estamos ahora, nos impide reconocernos unos a otros (e incluso uno mismo si lo piensas bien) y por qué no, nos hace centrar todos nuestros sentidos en ella.
Pongamos un ejemplo concreto, cuando conducimos en una carretera llena de niebla, nuestra atención se torna exclusivamente para ella, encendemos las lunes antiniebla, es aconsejable quitar la luz de largo alcance por la de cruce, intentamos ver más allá aunque sea imposible por si nos acercamos mucho a un obstáculo del cual no tengamos tiempo a reaccionar, disminuimos y adecuamos nuestra velocidad, dejamos de centrarnos en la música y en las conversaciones interesantes del interior de nuestro vehículo.
¡OJO!, no digo que conduciendo te centres en otras cosas antes que en dichas condiciones meteorológicas adversas.
Ahora bien, como decía, la niebla no nos permite ver más allá de lo que estamos viviendo ahora, cuando pasamos un duelo, nos sentamos y decidimos (ya sea de manera consciente o porque nos toca vivir dicha situación) experimentar, identificar y respetar las emociones que estamos sintiendo en dicho momento concreto.
Cuando alguien nos viene y nos dice “el tiempo lo cura todo”, no conseguimos verlo porque la niebla nos tiene envueltos en dicho momento dado.
La mayoría de las veces, por no decir siempre, dicho fenómeno emocional nos mantiene estáticos en la primera toma de contacto, nos agobia, nos hace dudar de nuestras propias habilidades, de nuestro intelecto, de nuestra planificación mental, te sientes solo y no sabes salir de dicho mundo.
Este mundo del cual hablaba anteriormente, nos hace sentir protagonistas de dicha historia, y en ocasiones responsables de ciertos sucesos que no esperábamos ni decidimos registrar en nuestra biografía emocional.
¿Qué te estoy intentando trasmitir artefiliático? Que en ocasiones, las cosas que te pasan no son responsabilidad tuya, es decir, tú no decides sobre las acciones del resto de personas, tú no eres más que la vida y la muerte, tú eres consecuente de lo que tú puedes controlar.
La niebla en ocasiones nos viene dada sin previo aviso, es impuesta y por tanto queramos o no, debemos aprender dentro de ella. Sin embargo, otras veces, somos nosotros mismos quienes nos implantamos y agravamos los efectos de dicha situación de la cual artefiliáticos si eres responsable y por tanto, puedes hacer algo para cambiar dicha circunstancia
No obstante, me atrevo a decirte que incluso en las que tú no eres responsable, aún puedes hacer algo para mejorar la situación
Pues bien, como todos sabemos, la niebla nos anula el sentido de la vista y desde nuestra posición actual, únicamente sentimos que estamos dentro de una pelota o una caja de las cuales no podemos acceder al exterior.
Debemos tener en mente, que dicha caja o pelota, somos nosotros mismos, que si queremos ir al exterior de dicho fenómeno, únicamente tenemos que decidirlo y comenzar a realizar los pasos e intervenciones pertinentes que nos orienten hacia dicho objetivo/meta la cual en nuestras condiciones actuales nos impide incluso desearlo.
Pues bien, como ya te he dicho, el primer paso es salir de la niebla, debes querer realizar dicho objetivo para poder acercarte a otros muchos de los cuales sin ser consciente, anhelas y quieres registrar en tu biografía experimental.
Conozco tus sensaciones actuales y sé que al principio da miedo, te da respeto e incluso prefieres quedarte en tu zona de confort (niebla), pero de lo que si estoy segura artefiliático, es que conforme vas caminando por la espesa niebla, se te irán apareciendo objetos, algunos grandes, otros pequeños, otros más claros, otros más difuminados… en fin, irás viendo cosas conforme vas caminando por la espesa niebla.
También, te digo querido artefiliático, que no sólo irás viendo objetos, sino también diferentes paletas de colores que te permitirán, percibir, entender e interpretar la cantidad de objetos y situaciones que te van apareciendo en dicho momento dado.
Pero, como te decía anteriormente artefiliático, difícilmente podrás visualizar lo que ahora te estoy diciendo, también es cierto que depende en que fase vital te encuentres, por lo que, no os quiero meter a todos en el mismo saco, de lo que estoy segura es que vivimos en un mundo de muchas adversidades elevadas a otras tantas.
Pues ahora bien, querido amigo, quisiera que imaginarás el efecto que te voy a decir, ¿serás capaz?, estoy segura de que sí
Recordando el ejemplo de la niebla conduciendo, lo vemos todo en blanco y negro, pero sabes que en caminar en ese momento dado y dejarlo atrás, un día podrás vivir una estupenda puesta de sol, ¿a qué sí?. Pues esto es igual.
Conforme vas dejando a la espesa niebla detrás, irás visualizando sensaciones, paisajes y emociones vibrantes que te recordarán el por qué estás donde estás ahora. También, te harán pensar aunque suene a “topicazo”, que todo esfuerzo tiene su recompensa.
Soy de las personas que opina que cuando tienes un objetivo o una meta ya seleccionada, te haces una idea de los posibles beneficios que vas a experimentar a nivel físico, psicológico, social y quizá, también espiritual. Pero, la realidad, en muchas ocasiones, supera a la ficción, nuestra imaginación lo es y artefilitático con esto lo que te quiero decir es que caminando por la niebla, sabes parte de lo que te espera al otro lado, pero el resto, no.
Hablo de paisajes, sensaciones, aprendizajes que no creías que ibas a experimentar en el momento cruzases esa situación dada. ¿Qué te quiero decir artefiliático?, muy sencillo, no quiero que pienses que sabes (o mejor, que crees que sabes) que en pasar la niebla vas a encontrar un único árbol, o que directamente no vas a salir de la niebla, porque como te estoy intentando trasmitir, no lo sabes, quizá no encuentres un árbol, quizá encuentres una isla, o quizá lo que tu creías que era niebla, es humo que sale de una fábrica que tienes al lado que en acabar la jornada laboral, ésta cesa por completo.
No quisiera artefiliático que te desanimarás por el momento actual y dejarás de vivir la gran cantidad de experiencias que estoy segura que te arrepentirás por no dar el primer paso en tu espesa niebla.