Se conoce como quemadura solar al enrojecimiento que aparece en la piel tras exponerse al sol o a otro tipo de luz ultravioleta, y aunque este tipo de lesión cutánea puede aparecer en cualquier momento del año, es durante la primavera y el verano cuando son más frecuentes ya que, como consecuencia de las elevadas temperaturas, la piel está más expuesta.
Síntomas
Con frecuencia los primeros signos de una quemadura solar tardan varias horas en aparecer y el efecto total para la piel pueden no aparecer durante las primeras veinticuatro horas e incluso por más tiempo. Entre los posibles síntomas de este tipo de quemaduras destacan:
Piel roja y sensible que es caliente al tacto.
Ampollas que se desarrollan horas e incluso días después.
Reacciones severas, como por ejemplo fiebre, escalofríos, náuseas o erupción cutánea.
Peladura de la piel en las zonas quemadas varios días después de sufrir la quemadura solar.
Sin embargo, aunque normalmente todos estos síntomas son temporales, el daño que ha sufrido la piel con frecuencia es permanente y puede tener graves efectos a largo plazo para la salud, pudiendo llegar incluso a provocar cáncer de piel.
Causas
La quemadura solar aparece cuando el grado de exposición al sol, u otra fuente de luz ultravioleta, excede la capacidad del pigmento protector del cuerpo, lo que se conoce como melanina, para proteger la piel. Así, por ejemplo, en una persona con piel muy clara puede aparecer en menos de un cuarto de hora de exposición al sol durante el mediodía, mientras que en una persona de piel oscura puede tolerar el mismo tipo de exposición durante algunas horas.
Es importante saber que, pese a lo que mucha gente cree:
Hay que huir del bronceado rápido y de los falsos mitos que le rodean. La exposición al sol sin protección causa en todos los casos envejecimiento prematuro de la piel.
La exposición al sol puede ser la causa de quemaduras tanto de primer como de segundo grado.
Aunque por lo general el cáncer de piel suele aparecer durante la edad adulta, sus orígenes se encuentran en las exposiciones solares llevadas a cabo desde la infancia. El cáncer de piel puede, por tanto, prevenirse protegiendo la piel durante toda la vida de forma adecuada.
Factores de riesgo
Nadie está a salvo de este tipo de quemaduras, sin embargo sí que existen algunos factores que aumentan el riesgo de sufrirlas:Los bebés y los niños son especialmente sensibles a los efectos dañinos del sol.
Aunque cualquier tipo de piel puede quemarse, son las personas con piel clara las que tienen mayores posibilidades.
Los efectos nocivos del sol son peores durante las horas de máxima intensidad, es decir, entre las doce del mediodía y la cuatro de la tarde, por lo que se deberá evitar al máximo la exposición a estas horas.
Del mismo modo, los rayos solares son más fuertes en las altitudes más grandes y en las latitudes más bajas, es decir, más cerca de los trópicos.
Igualmente, hay que ser conscientes de que el reflejo del agua, la arena o la nieve pueden intensificar los efectos de los rayos solares.
Las lámparas de sol pueden causar una quemadura grave.
Algunos fármacos pueden provocar como efecto secundario que la piel de quien lo toma se vuelva más susceptible a las agresiones del sol.
Prevención y tratamiento
Como siempre, ante cualquier problema de salud la mejor medida que se puede tomar es la prevención. En este caso, siguiendo algunas medidas como usar un protector solar adecuado para cada tipo de piel, gorras o sombreros para proteger la cabeza o permanecer a la sombra siempre que sea posible, sobre todo durante las horas de máxima intensidad.Sin embargo, por si esto no fuera posible y la quemadura solar no puede evitarse, existen una serie de remedios caseros que pueden ser de gran utilidad tal y como se explica en los siguientes vídeos. No obstante, es recomendable visitar a un médico si la quemadura es grave para que aconseje el mejor tratamiento y así evitar daños mayores.
Fuente: facilisimo.com y Medline Plus.
Imágenes (por orden de aparición): Mike Monaghan/Flickr, SheilaTostes/Flickr, mysza831/Flickr y Mike Monaghan/Flickr.