Un primer paso antes de comenzar con el uso de pañales para adultos es reducir lo más posible la incontinencia urinaria o fecal. Para eso, se tiende a recomendar una serie de horarios regulares para que el adulto mayor vaya al servicio. Además, es importante que el camino a recorrer para ir al baño sea corto y con un acceso fácil. De esta manera, se reduce al mínimo el inconveniente o la dificultad de llegar al servicio. El camino debe estar bien iluminado, libre de obstáculos y con un acceso fácil.
Los adultos mayores que cuentan con un cuidador o cuidadora, deben trabajar en conjunto, buscando estimular al máximo la contención hasta llegar al servicio. Eso los ayudará a posponer el uso de pañales para adultos. Es muy importante acompañar además con afecto, comprensión y cariño esta etapa de la vida.
Tipos de pañales
Cuando la incontinencia no puede evitarse, es hora de empezar a pensar en los pañales para adultos. Hay muchos y de diferentes características. Desde pañales de talla grande hasta estrechos, enteros o empapadores. Cada uno con sus características propias.
Una modalidad de pañales para adultos son los empapadores, que se ponen entre la cama y el anciano Sirven como un protector de la cama y son los menos invasivos.
Los pañales estrechos se ajustan utilizando tiras adhesivas. Son bastante similares a los de los bebés, pero con el tamaño de hombres y mujeres adultas.
Los pañales enteros tienen forma de bragas o calzoncillos, se ponen de la misma forma y son cómodos.
Las características de los pañales se diferencian en capacidad de absorción, tiempo que tardan en absorber y retener el líquido y capacidad de mantenimiento de superficies secas. Al elegir el pañal para adultos más adecuado, la clave está en encontrar el modelo que mejor se adapte a cada tipo de persona.
¿Cómo se cambian los pañales para adultos?
El cambio de pañales en personas adultas se debe realizar de a dos, especialmente si la persona es muy dependiente y no puede colaborar.
Los pasos incluyen:
Colocar al anciano boca arriba y desprender las tiras de sujeción.
Girarlo para uno de los lados para quitar el pañal usado.
Limpiar la zona con agua y jabón neutro.
Deslizar el nuevo pañal y asegurar que quede centrado.
Ajustar las tiras adhesivas. El pañal para adultos implica una necesidad en hombres y mujeres de la tercera edad que puede socavar su autoestima, por eso es muy importante acompañarlos y brindarles cariño con el cuidado en esta etapa de sus vidas. Así se sentirán más animados y podrán afrontar la incontinencia sin un aporte negativo de depresión o sentimiento de carga hacia los cuidadores y familiares.