Lo más importante es que logremos que esas herramientas se vuelvan hábitos y cada uno, a su manera, las maneje y ordene a su conveniencia. Por eso, quiero compartirles algunas prácticas que realizo diariamente, de la mano de algunos consejos que Leandro Taub, escritor y autor del libro “Sabiduría Casera”, nos propone para que cada mañana sea un ritual de salud, belleza y espiritualidad.
1. Agradecer por el nuevo día
Tener un cuerpo y una vida humana es una bendición. No sabemos cuanto tiempo vamos a vivir, pero si podemos agradecer siempre por estar aquí y ahora. Poder pensar, comer, caminar, amar, saludar y disfrutar de la vida es un privilegio y un regalo divino. Hoy tenemos la oportunidad de cambiar, evolucionar y avanzar, agradeciendo por el cuerpo y la vida que tenemos. Un gesto de gratitud, sin duda, cambiará nuestro día.
2. Respirar
Recién nos levantemos, realizar respiraciones profundas, largas y lentas es ideal para llenarnos de energía vital. Podemos empezar por llenar el abdomen y después el pecho. La visualización (sentir que el aire que inhalamos es más fresco) también nos puede ayudar a que ese momento sea más consciente.
3. Estirar
No existe un solo día que no estire mi cuerpo! Estirar nos permite preparamos físicamente para el resto del día. La columna, de acuerdo con la somática, es el eje de nuestro cuerpo ya que todos los órganos están conectados a ella. Por lo tanto, es fundamental estirarla, flexionarla hacia delante y hacia atrás. Recomiendo realizar algunos saludos al sol (serie de 12 posturas yóguicas) para calentar y masajear nuestros órganos internos. Estas posturas tienen como misión de activar las funciones fisiológicas, estirar la columna y los músculos y calentar todo el cuerpo, brindándonos flexibilidad y vigor.
4. Autosugestión positiva
La mañana, psicológicamente, es el momento perfecto para trabajar la autosugestión positiva; un estímulo que pone nuestro cuerpo y mente en una frecuencia positiva. Puede ser una simple sonrisa al frente del espejo o afirmar o concentramos en algo bello que queramos resaltar de nuestras vidas.
5. Elección de una virtud positiva
Escoger una virtud que queramos trabajar a lo largo del día es muy beneficioso para nuestra salud emocional y mental. Por ejemplo, ser más paciente hoy, escuchar antes de hablar, tener más humildad etc.
6. Baño frío
Aunque para muchos les suena casi imposible tomar un baño frió a la hora de la mañana, es maravilloso para despertarnos. Si no es completamente frío, aconsejo que sea con agua tibia.
7. Masaje abdominal
Realizar un masaje alrededor del ombligo en la mañana es muy beneficioso para nuestro cuerpo. Nos ayudará a que el sistema digestivo funcione y al mantenimiento de los órganos abdominales que son nuestro laboratorio interno.
8.Desayuno saludable
El desayuno es una de las comidas más importantes del día! En lo posible, nunca ayunes o lo pospongas, pues hemos estado entre 6 y 10 horas sin comer y nuestro cuerpo necesita grandes cantidades de energía. María Paula Estela, Nutricionista Dietista, recomienda variedad de frutas pues son rápidamente asimiladas.
Algunos expertos también sugieren té de hierbas, de romero o tomillo ya que son muy buenos para despertarnos y poner en marcha nuestro cuerpo.
9. Salida al aire libre
Durante la mañana, exponerse el sol es algo esencial. El sol, fuente de toda la vida terrestre, es la mejor medicina para comenzar el día con el pie derecho. Yo suelo salir a trotar, pero cada uno puede escoger la práctica que más le guste. Caminar, prácticas como el Tai Chi o Yoga, son otras opciones para exponerse al sol, mientras realizamos alguna actividad física.
Recordemos que el aire de la mañana es mucho más cargado en oxígeno, contiene más prana (palabra en sánscrito que significa energía absoluta).
10. Levantarse antes de la salida del sol: tiempo de reflexión
Antes de la salida del sol, el entorno esta en calma y armonía. Escribir, meditar o reflexionar pueden ser prácticas altamente beneficiosas. Durante esta hora del día, nuestra mente esta mucho más despejada para tomar decisiones y llenarnos de paz, calma y entendimiento.
11. Saludar a la madre naturaleza
Es un beneficio inmenso, todos los días, enfrentarnos y saludar al sol, el cielo, el viento, los árboles, las montañas, la tierra. La naturaleza nos ayuda a reinstalarnos y ubicarnos en su mundo, del cual somos parte.
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Fotografía: The Art of Being Green
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