Erupción submarina de El Hierro
El pasado mes de marzo y después de unos 5 meses de erupción submarina, la actividad volcánica registrada en la isla de El Hierro se da por finalizada. Aun así, se siguen estudiando los efectos que dicho fenómeno podría haber generado o pudiera producir en un futuro.
Durante los meses que ha durado la erupción, se estima que se han emitido a la atmósfera cantidades de CO2 que quintuplicaban los valores normales diarios de la zona. Sin embargo, el catedrático de Zoología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Santiago Hernández, aseguró en su momento que no había motivos para que la población se alarmarse, y que aunque las emanaciones de gases tendrán un efecto en la fauna y flora marina, éstas serán puntuales, transitorias y de rápida recuperación.
Es evidente que la salida de estos gases influirán sobre la vida marina, y que durante un corto periodo de tiempo La Restinga dejará de ser el paso de algunas especies como por ejemplo delfines o atunes. Pero según la experiencia que hay de otros ecosistemas de zonas de vulcanismo submarino, se prevé que después de ese periodo extremo, la zona de lugar a una explosión de vida, dando paso a nuevas y diversas especies tanto submarinas como terrestres.
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