La depilación es una de esas cosas que siempre nos da pereza hacer pero que resulta tan necesario como evidente una vez se hace, o cuando no estamos recurriendo a ella. En una sociedad tan metrosexual, tan enfermiza a veces y obsesionada con el físico, el cabello y el pelo por todas las partes del cuerpo es algo que se tiene que tener muy en cuenta a la hora de lucirlo. Cuando hablamos de depilación, hablamos evidentemente del hecho de eliminar vello en muchas partes del cuerpo.
Lo más habitual es depilar las piernas, axilas, cejas y las ingles. Se puede depilar de la forma clásica, con cera o pinzas, o se puede depilar con cuchilla o con láser. Cada cual es libre de la elección en función de la sensibilidad de cada uno en cuanto al dolor y en cuanto a la irritabilidad de la piel.
La cera caliente es la forma de depilación más habitual, el problema es que es el método más doloroso y que cuando se usa con una temperatura demasiado caliente, podemos provocar encarnaciones en los pelos y demás irritaciones que nos echarán para atrás.
Pero qué pasa si te decimos que hay una forma de depilación muy natural, saludable y apenas invasiva que podrás usar sin gastar apenas dos ingredientes y que es muy pero que muy eficiente. Hablamos de la depilación con azúcar y limón.
¿En qué consiste este método? Os damos las pistas y pautas necesarias
Como el nombre indica, es una forma de depilación en la que el azúcar y el limón o su jugo, son parte clave del proceso. Se usaba en la antigua Egipto por lo que su fiabilidad está asegurada, por ello se usa aún en Asia, Oriente Medio y en algunas zonas de la Europa Oriental.
¿Cómo realizar la depilación con el azúcar y limón?
Necesitaremos en primer lugar los ingredientes, que no son más que 2 tazas de agua, 1 taza de azúcar blanco y 1 limón exprimido.
Después de exprimir el limón entero en un vaso, en una sartén aparte pondremos el agua, el jugo de limón y toda la taza de azúcar. Lo pondremos todo a fuego lento y el azúcar tendrá que ir disolviéndose en todo el agua, que esté formándose una especie de masa.
Cuando vemos que empiezan a salir bolitas por la temperatura haremos la prueba del cuchillo, meterla en el agua y si vemos una especie de bola es que está totalmente preparada la masa.
Apagaremos el fuego y dejaremos que se enfríe toda la mezcla, que tenga una buena consistencia.
Es importante que antes empezar a depilarnos, nuestra piel esté 100% limpia y seca. Una vez verificado esto, colocamos el producto verificando que esté a una temperatura tibia. Esto es muy importante porque así evitaremos quemaduras. También conviene probar su eficacia con una primera tirada. Cuando pongamos la masa tendremos que tener en cuenta simples hechos como que el tirón tiene que ser siempre en el sentido contrario al cabello, es decir, al crecimiento del vello. Esto lo haremos hasta que encontremos toda la pierna o la zona a depilar, sin un solo pelo.
Lávate bien la zona con agua y esperamos que disfrutes de esta forma tan casera y saludable de depilación, la depilación con azúcar y limón.
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