Entre 120.000 y 150.000 personas padecen la enfermedad de Parkinson en España y, cada año, se detectan unos 10.000 nuevos casos, de acuerdo a datos estimados de la Sociedad Española de Neurología (SEN). Pero además se estima que, debido al envejecimiento progresivo de la población, ¡su prevalencia podría llegar a triplicarse en 2050!
La enfermedad de Parkinson es ya el segundo trastorno neurodegenerativo más frecuente, por detrás de la enfermedad de Alzheimer, por lo que con motivo del Día Mundial del Parkinson, nos unimos a la SEN para insistir en la necesidad tomar medidas en la lucha contra esta enfermedad donde, potenciar la investigación, debe ser un factor esencial.
Aunque actualmente no exista un tratamiento que permita curar la enfermedad, sí se dispone de múltiples tratamientos sintomáticos, médicos y quirúrgicos, que han conseguido mejorar radicalmente la calidad de vida de los pacientes. “Contamos con un arsenal terapéutico impresionante para, aproximadamente, el 75% de los síntomas. El reto actual, y afortunadamente creo que se conseguirá en pocos años, es tratar de encontrar fórmulas para que la enfermedad se detenga o, al menos, que se ralentice mucho y conseguir tratar ese 25% de síntomas que aparecen de manera más tardía y que no responden a la terapia convencional”, explica la Dra. Rosario Luquin Piudo, Coordinadora del Grupo de Estudio de Trastornos del Movimiento de la Sociedad Española de Neurología.
Otro reto es conseguir avanzar aún más en el diagnostico precoz, puesto que cuanto antes se traten los síntomas, más posibilidades habrá de controlarlos. “En este sentido, la comunidad científica ha avanzado muchísimo en el estudio del Parkinson premotor”, apunta la Dra. Rosario Luquin Piudo. Y es que, un paciente con Parkinson puede desarrollar, entre diez y veinte años antes del comienzo de los síntomas motores, muchos trastornos no relacionados con la motricidad: en un 40% de los casos la primera manifestación del Parkinson es la depresión, también puede manifestarse en problemas de memoria, estreñimiento, pérdida de olfato, alteraciones urinarias, disfunción sexual,… y, de forma muy habitual, en trastornos del sueño. A este respecto hay que señalar que un estudio español acaba de determinar que el 82% de los pacientes diagnosticados con trastorno del sueño REM desarrollarán en el futuro una enfermedad neurodegenerativa.
Esperemos que pronto superen esos retos, ¿verdad?
Imágenes (por orden de aparición): Alex E. Proimos/Flickr y jamesfischer/Flickr