Las enfermedades venéreas afectan a millones de personas alrededor del mundo, unas son bastante molestas y otras además de provocar síntomas severos, tienen la desventaja de ser incurables. Tal es el caso del Sida, que muchos confunden con el VIH.
¿Sabes cuál es la diferencia entre ambas cosas? si todavía no lo sabes o simplemente quieres un poco más de información al respecto, continua leyendo, porque a continuación te decimos todo lo que necesitas saber en torno a este tema.
VIH
El VIH o Virus de Inmunodeficiencia Humana, tal como su nombre lo indica, afecta el sistema inmunológico de las personas.
Una vez infectada con el virus, si la persona no se trata el mismo provoca que el sistema se deteriore haciendo que el individuo sea susceptible a contraer diversos tipos de infecciones virales y bacterianas.
Este virus por lo general se transmite mediante contacto sexual con alguien que sea portador, pero también es posible adquirirlo si se comparten agujas con personas infectadas. Además de los antes mencionados, hay otros medios de contraer la infección, pero son menos comunes. En este sentido es bueno destacar que el VIH no se propaga por medio del agua, el aire o un simple toque.
Hay varias formas de evitar contraer este virus, pero la más segura es la abstinencia sexual; sin embargo, ni siquiera esta medida garantiza que una persona no se vaya a infectar a lo largo de su vida.
Otras medidas incluyen usar preservativo, evitar compartir agujas, tomar antiretrovirales si se sabe que se tuvo contacto con el virus, entre otras.
Una de cada seis personas no sabe que está infectada, esto debido a que muchas veces no presentan síntomas. Actualmente existen varios test para determinar si se es portador del virus, incluso ya se han creado pruebas caseras.
Una vez que se determina que se es portador, el tratamiento a seguir dependerá del estado o la etapa en que se encuentre el virus.
Sida
El Sida o Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida es la etapa final del virus del VIH. Se caracteriza por daño severo en el sistema inmunológico.
Sólo aquellos que son VIH positivo pueden desarrollar Sida si la infección no es tratada a tiempo, por lo tanto, la única manera de evitar llegar a este estado es recibiendo el adecuado tratamiento contra el VIH en el momento preciso.
Una vez que se tiene Sida los síntomas resultan evidentes: deterioro de la salud en general y susceptibilidad a los virus, bacterias y algunos tipos de cáncer.
Finalmente, no existe cura contra el Sida y es una enfermedad que anualmente cobra la vida de millones de personas.
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