El resfriado es la enfermedad más común en todo el mundo, con una media de 2 a 5 resfriados por adulto al año. Además, se debe tener especial atención con los niños y los ancianos, ya que son los más afectados por esta enfermedad.
Los resfriados pueden darse en cualquier época del año. Siempre se asocian a la época de invierno, pero está comprobado que el 20% se producen durante el periodo estival.
¿Es igual un resfriado de invierno que uno de verano?
No existe ninguna diferencia entre un resfriado de verano y uno de invierno, los síntomas y el cuadro que presenta el paciente son los mismos. Ambos son una infección de las vías respiratorias superiores que dura, aproximadamente, una semana y su periodo de incubación es de 48 a 72 horas.
En verano es mucho más molesto, ya que te obliga estar en reposo varios días en casa y tomando comida caliente como caldos o sopas.
Factores de riesgo más frecuentes
Entre las principales causas encontramos los cambios bruscos de temperatura, provocados por los sistemas de refrigeración, aunque también existen otros factores como la fatiga, el estrés, enfermedades crónicas (especialmente las respiratorias) o una dieta inadecuada.
Como explica la doctora Paloma Casado, " los aires acondicionados son uno de los principales causantes de los cuadros catarrales durante el verano, ya que bajan las defensas de nuestro organismo y los virus aprovechan ese momento para atacar nuestro sistema inmunológico y provocan el resfriado."
Evitar los resfriados de verano
Según la doctora Casado, "debemos evitar los cambios bruscos de temperatura, no tomar bebidas ni muy frías ni muy calientes, y sobre todo, estar constantemente limpiándose las manos, ya que es uno de los medios principales por los que se contagian los virus."
Lo mejor es no exponerse mucho tiempo al sol y mantener el sistema de climatización a una temperatura entre 22 y 24ºC. La humedad del ambiente debe superar el 30%. Si hay zonas de la casa muy secas, es aconsejable poner una planta para humedecer más el ambiente, además de los propios humificadores.
Seguir una dieta equilibrada es otro de los factores que ayuda a evitar estos catarros, aumentando el consumo de líquidos y tomando una buena proporción de fruta y verduras para mantener un nivel de buena salud.
Si hay personas que ya han contagiado, es aconsejable airear la habitación, para que no se concentren los virus. Igualmente recordarles que deben cubrirse la boca cuando estornuden o tosan, ya que en un estornudo pueden llegar a expulsarse unas 40.000 gotitas de saliva, a una velocidad de 150 Km/hora y a una distancia de 2 oó 3 metros.
¿Existe un tratamiento contra los resfriados?
No hay un tratamiento curativo como tal, el mejor método es evitar todos los factores desencadenantes o provocadores. Es muy importante resaltar que los antibióticos no son efectivos contra el resfriado, ya que al bajar nuestra flora hacemos que se propague más el virus. Lo que si podemos hacer es tomar antitérmicos para reducir la fiebre.
- Los tratamientos que se pueden utilizar en el resfriado son:
- Lavados nasales de agua con sal, que alivian las molestias de la congestión nasal y ayudan a limpiar las mucosidades.
- Descongestionantes nasales, como oximetazolina, efedrina, fenilefrina, son muy útiles para controlar el goteo nasal y se consigue un alivio inmediato. Pero no es recomendable utilizarlos durante mucho tiempo, especialmente en el caso de las embarazadas, diabéticos o hipertensos.
- Los analgésicos o antitérmicos, como pueden ser el ibuprofeno o paracetamol, consiguen aliviar los dolores y disminuir la fiebre.
- Los antitusígenos (codeina, dextrometorfano, cloperastina), son de ayuda en la tos irritada, pero no se deben utilizar si la tos es persistente o con mucosidad.
- Los mucoliticos y expectorantes, hacen eliminar las mucosidades.
Existen tratamientos naturales como, por ejemplo, tomar comidas y bebidas templadas, beber zumos de frutas, hidratarse y descansar. Así mismo, no debemos olvidarnos de llevar una buena alimentación para subir las defensas.