En los últimos tiempos, se ha logrado discernir en profundidad acerca del rol de la vitamina D. Como se ha dicho en otras ocasiones, esta vitamina puede ser muy similar a los esteroides. Siendo moléculas muy solubles en lípidos o grasas. De hecho, más allá de su función vinculada a la matriz ósea, puede definirse como una prohormona. Siendo muy importante en la regulación del genoma humano, por lo que niveles deficitarios de la misma, podrían ocasionar graves efectos.
Tal como hemos mencionado en otra ocasión, el efecto más conocido de la vitamina D, está referida a su función reguladora de la homeostasis del calcio. Sin embargo, de acuerdo a estudios recientes, realizados en adultos, asocian esta vitamina con la síntesis y secreción de insulina por parte de la célula β pancreática. Por ello, se podría afirmar, que el déficit de vitamina D, se ha relacionado con el desequilibrio de la resistencia a la insulina.
Cabe destacar, que más recientemente, se han determinado ciertos efectos de la vitamina D sobre la tensión arterial en niños. Este tema tan interesante, surge por la solicitud de una seguidora. Ella me comentó que tiene un niño de ocho años, con tendencia a la obesidad y le han comentado el riesgo de desarrollar trastornos de tensión arterial. Por ello, desea que le aclare, un poco más al respecto.
Basándome en estudios que se han realizado acerca de este interesante tema, honré la solicitud de esta dama. Incluí algunas generalidades de la vitamina D, mencionado además acerca de su importancia. Añadí también cierta información que ilustra los hechos más recuentes en torno a la importancia de la vitamina D y la tensión arterial en niños. A sabiendas, de lo novedoso del tema, decidí realizar un sencillo artículo para compartirlo aquí en mi blog.
Recordando acerca de la vitamina D
Sin ánimo de resultar academicista, es importante que se emplee adecuadamente la terminología. Así de esta forma, al hablar de las fuentes de vitamina D, se utilizarán dos nombres, de acuerdo al origen. Por ello, al referirse a la vitamina D, de origen animal, se mencionará como colecalciferol o vitamina D3. A su vez, al referirse a la vitamina D, de origen vegetal, se mencionará como ergocalciferol o vitamina D2.
El hecho de ser sintetizada en la piel, indica que en realidad, no es una vitamina. Básicamente, porque las vitaminas, suelen ser sustancias orgánicas de origen exógeno. Sería un compuesto precursor de una hormona, la cual posee múltiples efectos sobre una gran cantidad de tejidos del cuerpo.
Se sabe, que más del 90% del colecalciferol que se encuentra en el cuerpo, es sintetizado en la piel. Es decir, la síntesis cutánea inducida por la radiación ultravioleta solar. Específicamente la UVB, cuya longitud de onda es de 280-320 nanómetros. Este proceso, involucra directamente al 7-dehidrocolesterol. Además de ello, es importante recordar, que la ingesta de alimentos animales y vegetales, aportan pequeñas cantidades de colecalciferol y ergocalciferol respectivamente.
Hay que recalcar, que tanto el ergocalciferol como el colecalciferol, carecen de actividad biológica. Por ello, para que puedan ser metabólicamente activos, deben sufrir una serie de procesos.
¿De qué depende la síntesis cutánea de vitamina D?
Se han logrado establecer varios factores están asociados con la síntesis de vitamina D en la piel.
Edad
Esto está muy relacionado con la cantidad de 7-dehidrocolesterol en la epidermis. De acuerdo a los estudios, los adultos mayores, producen menor cantidad. A manera de ejemplo, se puede decir que una persona mayor de setenta años, produce solo el 25% de lo que logra producir una de veinte.
Cantidad de melanina de la piel
De esta forma, una persona con mayor contenido de melanina, requiere mayor tiempo de exposición solar. Es decir, que las personas con tonos más claros de piel, sintetizan el colecalciferol, en menor tiempo. Esto se ha asociado, con la capacidad de la melanina de absorber los fotones solares.
Barreras físicas
Aunque pueda resultar un poco increíble, los protectores solares, también impiden que se produzca el colecalciferol. Esto se debe, a que estos compuestos, son capaces de absorber las radiaciones, antes de que éstas logren penetrar en la piel. De acuerdo a ciertas investigaciones, se ha logrado establecer, que los protectores solares, influyen en la producción de colecalciferol.
Se ha visto, que un protector solar, con un factor superior a 8 fps, logra disminuir su producción en un 95%. En protectores solares de 15 fps, la reducción de la capacidad de producción de colecalciferol, puede alcanzar hasta un 98%. Este efecto puede darse también con el uso de ciertos tipos de ropa. Sobre todo, algunos tipos de playeras o camisas con mangas largas y telas especiales con tratamiento de fps.
Flujo luminoso
Otro factor muy importante para la síntesis de vitamina D, lo constituye, la intensidad de la luz. Es importante destacar, que dicha intensidad, depende de ciertas variables, tales como hora del día, latitud y la estación del año. Recuerden que la latitud, de una forma sencilla es la distancia de un punto de la tierra a la línea del ecuador. Así de esta forma, se ha comprobado, que en época invernal, los rayos solares entran en la tierra con un ángulo más oblicuo.
Esto hace que una mayor cantidad de fotones, sean absorbidos por la capa de ozono. Se ha comprobado algo interesante, en lugares con latitudes superiores a los 37º al norte y al sur del Ecuador. Se ha corroborado, que en los meses de invierno, el número de fotones que alcanza la superficie terrestre es menor. Ello, prácticamente anula la síntesis de vitamina D en la piel.
Se ha observado, que a lo largo del día, ocurre un fenómeno similar. Esto provoca, que el ángulo con el que penetran los rayos solares durante las primeras horas de la mañana y las últimas de la tarde, sean más oblicuos. Es por esta sencilla razón, que generalmente se recomienda, tomar el sol desde las 10:00 am hasta las 3:00 pm.
¿Posee la vitamina D vinculación con otras funciones corporales?
Es importante destacar, que hasta hace poco tiempo, existía la creencia de que la función principal de la vitamina D, era en el metabolismo óseo. Es decir, una función reguladora de la homeostasis del calcio. No obstante, a raíz del descubrimiento de una serie de receptores de la vitamina D3, se han puesto de relieve otras funciones.
Hoy en día, se conoce que los receptores de vitamina D se ubican en la mayoría de las células y tejidos. De acuerdo a la ciencia, esto involucra alrededor de unos 3000 genes. Esto acarrea, que puedan desatarse múltiples manifestaciones, por efecto del déficit de esta vitamina.
Dentro de estas funciones, denominadas como extraesqueléticas, se ha observado que la deficiencia de vitamina D, conduce a la disminución de los niveles circulantes de calcio. Esto, se traduce por efecto compensatorio, en un aumento de los niveles de la hormona paratiroidea. Estio, conlleva de forma directa al padecimiento de un hiperparatiroidismo secundario, lo cual afecta la salud ósea. Muchos de los estudios realizados sobre la vitamina D, en los últimos años, tiene que ver con la salud infantil. Esto ha permitido, extender mucho más allá de la homeostasis del calcio, el rol de esta vitamina. De hecho, se sabe, que ella, desempeña un papel relevante sobre el adecuado desempeño del sistema inmunitario. Esto ha permitido ahondar con mayor precisión, en el papel que juega la vitamina D sobre los sistemas inmunitarios innatos y adaptativos.
A su vez, en algunas otras investigaciones, se han empezado a desvelar, algunos hallazgos muy interesantes. Algunos de ellos, están asociados, con los posibles efectos neurohormonales de la vitamina D, en el desarrollo del sistema nervioso central. Lo cual vincula esta vitamina, con un adecuado desempeño cerebral. Y en caso de déficit de esta vitamina, con trastornos de salud mental.
Vitamina D y tensión arterial
Los estudios más completos, que hoy en día se realizan, sobre mujeres embarazadas, incluyen una evaluación para determinar un déficit de vitamina D. Esto hace que se equilibren los niveles de esta vitamina, mediante suplementos, que permitirán asegurar, una salud adecuada en los niños.
Las recomendaciones actuales, son de 40-70ng/mL (nanogramos por mililitro) de calcidiol en sangre. Para lograrlo, se pueden utilizar suplementos diarios, que contengan hasta 5.000 UI. De acuerdo a las estadísticas de salud, esta sencilla medida podría tener un impacto muy importante en la prevención de enfermedades.
Ahondando mucho más en esta importante vitamina, se realizaron algunos estudios en niños con sobrepeso con deficiencia de vitamina D. Este estudio clínico, se realizó en UPMC Hospital Infantil de Pittsburgh (Estados Unidos) y fue publicado en la revista The American Journal of Clinical Nutrition. Se observó, que los niños que ingirieron una dosis relativamente alta de vitamina D, mostraron una tensión arterial más equilibrada.
Esto, en comparación con otros niños, que tomaron una dosis más baja. Este estudio clínico se realizó a lo largo de seis meses y durante este tiempo, se suplementó diariamente vitamina D. Además del efecto positivo logrado sobre la tensión arterial, se observó también una notable estabilización sobre la sensibilidad a la insulina.
Las recomendaciones actuales para la ingesta de vitamina D, están mayormente relacionadas con la optimización de la salud ósea. Sin embargo, para el Dr. Kumaravel Rajakumar, de la Universidad de Pittsburgh, esta vitamina va más allá de eso. Para el Dr. Rajakumar, la vitamina D, posee funciones que deben ser tomadas muy en cuenta. Esto se debe, a que ella, puede activar y desactivar genes. Dichos genes, son los responsables de regular los niveles de glucosa en la sangre, así como optimizar y equilibrar las funciones inmune y vascular.
Conociendo un poco acerca del estudio clínico de Pittsburgh
A efectos de la realización del estudio clínico del Hopital de Pittsburgh , el Dr. Kumaravel Rajakumar y sus colegas, convocaron 225 niños. La condición fue que presentaran deficiencia de vitamina D. Sus edades oscilaron entre los diez y los dieciocho años y tenían sobrepeso. Los niños se dividieron en tres grupos y se les dieron píldoras que parecían idénticas, pero que contenían diferentes cantidades de vitamina D. Así de esta forma, las dosis entregadas fueron de 600, 1.000 y 2.000 Unidades Internacionales (UI). Incluso, muy por debajo del máximo diario recomendado para su rango de edades que es de 4.000 UI.
Durante el ensayo, ni los participantes ni sus médicos sabían qué dosis estaba recibiendo cada niño. Al cabo de seis meses, se observaron hallazgos muy interesantes. A saber, los niños suplementados con 2.000 UI de vitamina D, presentaron niveles reducido de glucosa en sangre en ayunas. Además de ello, mostraron una mayor sensibilidad a la insulina. Esto indiscutiblemente, logra reducir la propensión a la diabetes y permite optimizar el desempeño cardiovascular. Esto se traduce en una excelente salud cardiovascular.
A su vez, los niños que recibieron 1.000 UI de vitamina D diariamente, mostraron una tensión arterial más baja. Esto es muy positivo, porque está comprobado, que la presión arterial alta, puede aumentar el riesgo de ataque cardíaco. Además de ello propicia enfermedades renales y favorece los accidentes cerebrovasculares.
Conociendo acerca de otros estudios con niños
Hasta ahora, múltiples investigaciones, han logrado identificar, la importancia de la vitamina D, desde la concepción. De esta forma, una deficiencia desde el nacimiento hasta la infancia, es un factor negativo. Esto se debe, a que está muy correlacionada con un mayor riesgo de tensión arterial elevada. No solo durante la infancia, sino también, en la etapa de la adolescencia. Esto fue publicado, en la revista Hipertensión, de la American Heart Association.
Para realizar esta investigación, los científicos, realizaron un registro exhaustivo de 775 niños desde el nacimiento hasta los 18 años. Este importante estudio, se llevó a cabo, en el Boston Medical Center. Un alto porcentaje de los niños, habitaban en urbanismos de bajos ingresos económicos y el 68% de ellos eran afroamericanos. Para los efectos de la realización del estudio, se partió estableciendo el valor considerado bajo de vitamina D. Este se fijó, en valores inferiores de 11 ng/ml (nanogramos por mililitro) en la sangre del cordón umbilical al nacer. Y durante la primera infancia, el valor establecido fue, inferior a 25 ng/ml en la sangre.
Se logró detectar, que los niños que presentaban bajos niveles de vitamina D al nacer, presentaban mayores riesgos de padecer hipertensión. Este riesgo se calculó en un 60% y abarcaba la etapa entre los seis y los dieciocho años. Así, los niños que permanecían con niveles bajos de vitamina D hasta la primera infancia, poseían mayor riesgo. Es decir, poseían el doble de riesgo de presentar presión arterial sistólica elevada entre los 3 y los 18 años. De hecho, las lecturas de presión arterial sistólica elevada, indican mayor propensión al riesgo de enfermedad cardiovascular.
Concluyendo
Hasta hace poco, el rol de la vitamina D, estaba muy circunscrito al sistema óseo. Sin embargo, la ciencia ha logrado desvelar, hallazgos muy interesantes. Estos hallazgos, permitirán en un futuro no muy distante, favorecer, a manera de “vacunación”, la salud de muchas personas. Es decir, permitirá, que niños y adolescentes en etapas tempranas de la vida, sufran menos riesgos, que pongan en peligro muchas de sus funciones metabólicas. Hay que mantener presente, que la presión arterial alta en la infancia, es un factor condicionante para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares en la edad adulta.
Por ello, es muy importante llevar una vida saludable, alimentándose adecuadamente para suplir las necesidades de vitamina D. Sobre todo, aprovechando la energía solar y los alimentos naturales que la contienen, principalmente en la etapa de embarazo.
Mi seguidora, madre del niño, que mencioné al inicio, se siente bastante aliviada. Por medio de la información que le compartí, que es la misma que presento en el post, logró aclarar muchas dudas. Me ha comunicado muy contenta, que afortunadamente ella nunca sufrió ningún desbalance de vitamina D, durante el embarazo. Ella cree, que su hijo, presenta este déficit, porque es poco amigo de los huevos. Y aunado a eso, le encanta estar en casa, luego de sus tareas escolares, entreteniéndose con la TV y los juegos de computadora. Es decir, es un niño, que hace poca vida a la intemperie y toma muy poco sol.
La última vez que me contactó, me comentó que, desde que su hijo se emocionó en practicar bici, ahora toma más sol. Ello le da más apetito y tolera bien ciertos alimentos a los cuales no se acercaba. Por supuesto, esto ha favorecido la estabilización de los niveles de vitamina D en su organismo.
“Alrededor del 70 por ciento de las mujeres embarazadas tienen deficiencia de vitamina D.”
Chris Mohr
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Referencias:
https://www.newswise.com/articles/clinical-trial-vitamin-d-supplementation
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5717866/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4928729/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3449318/
https://www.heart.org/en/news/2019/07/01/low-vitamin-d-in-babies-predicts-blood-pressure-problems-for-older-kids
https://www.sciencedaily.com/releases/2019/07/190701144254.htm
https://newsroom.heart.org/news/low-vitamin-d-at-birth-raises-risk-of-higher-blood-pressure-in-kids