son los maestros de ellos. Descubre tu fuerza sensible hoy con estas 15 señales de que tienes inteligencia sensible.
I. Te maravillas con lo que mueve a otros.
A la gente que goza de inteligencia sensible le maravilla el comportamiento humano. Consiguen percatarse de cosas como el lenguaje anatómico, el dialecto, y los tics personales. Observar a las personas ayuda a descubrir pistas sobre qué hace a cada individuo singular.
II. Eres un líder entusiasta que practica lo que predica.
La gente que tiene inteligencia sensible sabe que es absurdo dialogar y dialogar para entonces no poner en práctica sus palabras. En vez de liderar por medio de órdenes, lideran al dar el ejemplo.
III. Estás consciente de tus fortalezas y debilidades.
Las personas que tienen inteligencia sensible saben que no eres tan débil como tu parte más débil; sino más bien eres tan fuerte como tu parte más fuerte. Usan sus grandes fortalezas tanto como sea posible, para hacer de sus debilidades un punto debatible.
IV. Estás en paz con tu pasado.
La gente que dispone de inteligencia sensible no tiene tiempo para lamentarse. Ellos dejan su equipaje y siguen adelante en el presente, puesto que ahí es dónde ocurre el progreso.
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V. No te asusta el futuro.
La gente que cuenta con inteligencia sensible no se obsesiona por los sucesos del futuro que están fuera de su control. Se sienten cómodos viviendo en un planeta en que no hay una bola de cristal, por el hecho de que la vida se supone que es una aventura emocionante (no una rutina escrita en piedra.)
VI. Estás en sintonía con el presente.
Las personas que tienen inteligencia sensible no pasan sin más sus días anárquicos. En vez de eso, experimentan activamente los matices de cada momento en cada día de sus vidas.
VII. Eres un hábil y activo oyente.
Las personas que tienen inteligencia sensible saben que “oír” y “escuchar” son dos cosas muy, muy, muy diferentes. Ellas habitúan a parafrasear los dichos de una persona en forma de pregunta para asegurarse de que nada se perdió en la comunicación.
VIII. Eres capaz de darte cuenta qué te molesta.
La gente que cuenta con inteligencia sensible no deja que nada le aporte negatividad y controla su cerebro. Son muy observadores y exploran su medioambiente, buscando pistas que revelen por qué se sienten de la forma en que lo hacen y, más esencial, qué pueden hacer para mejorar.
IX. Te sientes cómodo hablando con amigos y extraños.
Las personas que tienen inteligencia sensible nunca conocen a un extraño que no les complazca. No les importa la edad, su raza, género, orientación sexual, o afiliación política; aman a todos por igual, puesto que aquí somos todos humanos.
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X. Eres ético en negocios y en relaciones.
La gente que tiene inteligencia sensible sigue su compás moral en los negocios y en la vida. Sus valores y opiniones pueden diferir de persona a persona, más altos estándares rigen su comportamiento.
XI. Sientes ganas de acudir al resto.
Las personas que cuentan con inteligencia sensible no precisan una razón para acudir a otros. Asisten a las mujeres mayores con sus bolsas de supermercado; se ofrecen a lavar los platos si un amigo o pareja ha preparado la comida; mantienen las puertas, no solo para las damas, sino más bien para los caballeros también.
XII. Eres capaz de leer a las personas como un libro.
Las personas que disponen de inteligencia sensible pueden interpretar el significado de los gestos, expresiones y lenguaje anatómico. Saben que no pueden depender solo del lenguaje, puesto que la presencia física de una persona con cierta frecuencia no coincide con las palabras que aseveran.
XIII. Eres firme en tu deseo de realizarte.
Las personas que tienen inteligencia sensible apuntan al éxito, no importa cuánto les lleve. Están prestas a lidiar con retrasos y solucionar deficiencias, por el hecho de que no se pierde hasta el instante en que se renuncia.
XIV. Estás motivado por razones en ti.
La gente que tiene inteligencia sensible construye una motivación que perdura. Se desconectan del resultado final y se enfocan en disfrutar el proceso. El desarrollo personal no ocurre en el momento del éxito, sino más bien a lo largo del proceso de desarrollo que lleva a ese éxito.
XV. Estás presto a decir que “no” cuando debes hacerlo.
Las presentan que cuentan con inteligencia sensible saben que puede haber mucho de algo bueno. Saben que no pueden hacerlo todo, con lo que se fijan prioridades determinadas con lo que es más esencial para ellos.
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