La vitamina C (ácido ascórbico) es una verdadera aliada para nuestra salud, ya que nos ayuda a fortalecer el sistema inmunológico. Seguramente hayas oído muchas veces que para prevenir resfriados o gripe hay que tomar zumos de naranja. ¿Por qué es bueno tomarlos? Por su cantidad en vitamina C. De hecho es mejor tomar la pieza de naranja sola (piensa que un zumo de naranja tiene la mitad de vitamina C que una pieza de naranja, así que deberás poner el doble de naranjas para tener el mismo efecto. Aunque hay que decir que tomar vitamina C tiene otras ventajas como por ejemplo ayuda en la formación de colágeno y es muy antioxidante, entre otros beneficios.
En este post de hoy me gustaría mostrar los alimentos que podemos consumir para conseguir una buena dosis de vitamina C y para ello voy a citar a la Dra. Roberta Madonna, especialista en Bioquímica Clínica y consultora nutricional:
“La vitamina C actúa como un potente inmunorregulador, así como antiflogístico natural. El requerimiento diario no es igual para todos ya que varía dependiendo de la edad, el sexo y diferentes condiciones fisiopatológicas que puedan darse.” En el caso de la vitamina C hay que decir que muy pocas veces se producen déficits de esta vitamina pero de todas formas es bueno saber que para evitar deficiencias de vitaminas es conveniente adoptar una dieta balanceada y equilibrada basada en el consumo diario de verduras de temporada. También es muy aconsejable tratar de variar la ingesta tanto en tipo y color. “El ácido ascórbico se encuentra principalmente en frutas, verduras y hortalizas frescas; fuentes de alimentos altos en cantidades de vitamina C, en particular, los kiwis y todos los cítricos, hojas de nabo, brócoli, col, espinaca, bayas, melones, pimientos y patatas.
¿Por qué se recomienda tomar vitamina C?
“La vitamina C es esencial para modular la actividad de los glóbulos blancos de la sangre en el curso de infecciones y para optimizar la reactividad general de las células inmunes- También en otras funciones orgánicas como facilitar la absorción intestinal de hierro y ayudar a la formación de glóbulos rojos de la sangre.” Además interviene en el proceso de síntesis de colágeno endógeno, mejora el tono y el estado de ánimo en el curso de fatiga, agotamiento, nerviosismo o estrés, y tiene un gran poder antioxidante y antiinflamatorio natural, para contrarrestar eficazmente el virus de la gripe, tanto en términos de prevención como de curación más rápida.
¿Un exceso de vitamina C puede hacer daño?
“Sí. Una ingesta de vitamina C mayor a las necesidades reales de nuestro cuerpo tomados durante un largo período de tiempo manifiesta efectos adversos.” Puede causar problemas en los riñones afectando a la formación de piedras en los individuos susceptibles. También puede alterar los resultados de un tratamiento farmacológico, ya que interactúa con otros medicamentos, como los anticonceptivos orales, los barbitúricos o los anticoagulantes.
¿Además de la vitamina C, qué otros alimentos se recomiendan para el fortalecimiento de las defensas inmunitarias?
“Para protegerse de los virus de la gripe es esencial tratar de aumentar las defensas de nuestro cuerpo y la comida que comemos es “la droga más potente” que podríamos tomar para este fin. Una dieta para este propósito debe centrarse, sobre todo, en el consumo de frutas, hortalizas y verduras de temporada, legumbres, granos enteros y proteínas, dejando de lado los alimentos procesados y refinados, llenos de conservantes y aditivos.”
Es importante seguir una dieta con fitonutrientes, oligoelementos y antioxidantes, que son más abundantes en el reino vegetal y que actúan para nosotros como verdaderos aliados contra las infecciones.