Consejos para cuidar las rodillas

¿Tienes molestias o dolor en tus rodillas? ¿Te cuesta subir las escaleras? ¿ o bajarlas¿ ¿Cuando corres sientes un pinchazo que te hacer parar? A continuación te damos unos consejos para cuidar tus rodillas:

Consejos y cuidados para tus rodillas

1. Controla tu peso: El sobrepeso puede aumentar el riesgo de padecer artrosis en tus rodillas. Mantener esos kilos de más a raya es imprescindible para tener unas rodillas sanas.

2. Haz ejercicio: No dejes oxidadas a estas articulaciones. Practica un deporte suave, si hace mucho que no haces ejercicio. comienza por deportes que no supongan un impacto para tus rodillas como bicicleta o nadar. Es muy importante que estires después de cada ejercicio. Si decides correr, aqui te dejamos unos consejos sobre el dolor de rodilla al correr.

3. Fortalece tus músculos: Contra más fuerte esté la musculatura de tus piernas menos sufrirán tus rodillas. Trabaja tus cuádriceps para darle estabilidad a tus articulaciones.

4. Cuida tu postura : Duerme de lado en posición fetal y si usas una almohada entre tus piernas tu columna estará mejor alineada. Por el día, evita los movimientos repetitivos y que puedan desgastar tu cartílago.

5. No olvides tu alimentación: Sigue una dieta equilibrada rica en verduras, pescados y lácteos. Recuerda que el carbonato de magnesio es un bien suplemento para reforzar tus músculos. Aquí te dejamos un listado con los alimentos ricos en magnesio.

Ejercicios para fortalecer las rodillas

Como hemos comentado, es necesario que hagas ejercicio regular para fortalecer tu musculatura y por tanto tus articulaciones. Aquí, te dejamos algunos ejercicios que puedes hacer para proteger tus rodillas.

1. Ejercicios de equilibrio: Mantén tu equilibrio sobre un sólo pie , alternando tus piernas. Intenta repetir al menos 10 veces.

2. Estabilidad: Siéntate sobre un fitball, apoya un pie en el suelo y levanta la otra pierna. Luego, pide a un compañero que te lance un balón en distintas direcciones. Haz 15 lanzamientos e intercala la posición de las piernas.

3. Resistencia: Túmbate en el suelo. Eleva la cadera y extiende la rodilla hasta formar un ángulo de 30 a 45 grados entre la pierna y el resto del cuerpo. Mantén seis segundos y vuelve a la posición inicial sin doblar la pierna. Repite 10 veces e intercala las rodillas.

4. Fuerza:Sujeta los extremos de una banda elástica con las manos y ubica la zona media de la planta del pie en el otro extremo. Flexiona la rodilla sin que supere un ángulo de 90º y extiéndela.

5. Isométricos:

1. Extiende una pierna a la vez y aplica tensión, como si estuvieras marcando los músculos.

2. Siéntate y estira las piernas evitando que los talones toquen el suelo. Mantén las rodillas rectas y estira los músculos durante 10 segundos. Relaja durante tres segundos. Intenta hacer 10 repeticiones, un par de veces al día.

¿Cuál es el calzado adecuado para proteger las rodillas?

Utilizar una zapatillas incorrectas puede ser la causa de lesiones y de dolor de rodilla. Lo primero es saber si pisas bien cuando andas y corres. un podólogo puede hacerte un estudio de tu pisada para intentar corregir irregularidades. Una vez tenga ese estudio te recomendará usar una plantillas adecuadas para tu pie. Según tu forma de andar o correr tu pisada será:

Pronador. Son las personas que mantienen las piernas bastante unidas y pisan con la parte interna del pie cuando corren.

Supinador. Es poco frecuente. Se trata de correr con las piernas separadas y apoyar la zona exterior del pie.

Neutro. Es una pisada plana, se mantienen las piernas en paralelo y no se sobrecargan la parte interna ni externa del pie.
Ante cualquier dolor o m0lestia acude a un profesional para que haga una valoración profunda del estado de tus articulaciones, a través de radiografías, ecografías, TAC y una valoración física. Una vez, que tengas tu diagnóstico sigue sus indicaciones para tu recuperación. Si te ha recomendado algún tipo de medicación, como Ostenil, no olvides seguir todo el tratamiento y no lo finalices antes de tiempo.

Fuente: este post proviene de Carbonato de Magnesio, donde puedes consultar el contenido original.
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Etiquetas: Consejos de salud

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