¿Para qué se usan?
Ya sabemos que los aceites esenciales son terapéuticos, pero… ¿Exactamente para qué son beneficiosos?
Por vía tópica
Podemos tratar diversas dolencias y patologías, así como problemas dermatológicos, digestivos y circulatorios comunes, ya que estos aceites atraviesan fácilmente la barrera cutánea y pasan a la sangre a través de la red de capilares.
Os dejamos una selección de aceites esenciales con distintas propiedades:
Para problemas respiratorios: Eucalipto, Pino o Hisopo.
Para problemas digestivos: Bergamota, Menta o tintura de Hinojo.
Para mejorar la circulación sanguínea: Menta, Ciprés o tintura de Vid Rojo.
Para picaduras de insectos: Eucalipto azul y Espliego macho.
Anti-arrugas: Rosa mosqueta y Argán.
Relajantes: Lavanda o Palmarosa.
Desinfectantes: Árbol de té, Salvia, Limón o Propóleo.
Para piel grasa: Limón, Lavanda o Ciprés.
Para evitar el cansancio: Pino silvestre (frotar en la zona de las glándulas suprarrenales)
Por vía oral
Podemos solucionar problemas infecciosos, como infecciones respiratorias, digestivas, vaginales o urinales. La cantidad no debe sobrepasar de 6-12 gotas diarias ni un máximo de 5 días. Eso sí, se deben tomar bien diluidos con aceites vegetales o miel.
A continuación hay un listado de diferentes esencias o aceites esenciales que se pueden tomar:
Para dormir bien: Mandarina.
Para el hígado graso: Limón.
Relajante y digestivo: Hierbabuena con té verde.
A veces ya vienen algunas pociones hechas, con variedad de aceites preparadas para una finalidad terapéutica específica.
Para preparar diluciones en casa es muy importante que nos informemos bien con antelación. Además, a la hora de tomar un aceite esencial hay que haberse leído el etiquetado y haber preguntado a un especialista para cualquier duda.
Hasta aquí sus usos, puedes leer que son los aceites esenciales en el enlace.
FELIZ MARTES