Este desodorante es más bien un antitranspirante, cumple las funciones de un antitranspirante y de un desodorante y no irrita la piel. La textura final es dura, similar a la de un stick pero se extiende con mucha facilidad. Para elaborarlo sólo necesitamos un par de ingredientes que se encuentran en la mayoría de cocinas.
Ingredientes:
40gr Bicarbonato de Sodio
40gr Almidón de Maíz
40gr Aceite de Coco
5 gotas Aceite Esencial de Árbol de Té o Lavanda
1 bote de crema con la tapa de rosca o similar para envasar o un envase de desodorante stick.
El Bicarbonato de Sodio posee propiedades antibacterianas que neutralizan los olores.
El Almidón de Maíz actúa como antitranspirante. Descongestiona y suaviza la piel y mejorará la textura del desodorante
El Aceite de Coco por sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, además de su capacidad hidratante.
El Aceite Esencial de Árbol de Te es fungicida, antiséptico y antibiótico, por lo que será responsable de eliminar las bacterias que causan el mal olor. También ayuda a tratar infecciones e irritación de la piel.
Elaboración:
Desinfectamos con alcohol el tarro y resto de utensilios que vamos a utilizar.
Vertemos en un bol el bicarbonato y añadimos el almidón de maíz.
Mezclamos bien y añadimos el aceite de coco.
Volvemos a mezclar de nuevo hasta conseguir una pasta homogenea.
Añadimos las 5 gotas de aceite esencial de árbol de teo o de lavanda.
Mezclamos para integran bien los ingredientes y envasamos en el stick o en el tarro y lo ponemos en la nevera durante 24 horas.
Pasado este tiempo ya tenemos el desodorante solidificado y listo para usar.
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