Durante el tiempo en el que dura el embarazo es algo muy común que la mujer engorde una media de entre 10 y 15 kilos.
En el parto se pierden unos 6 kilos y a medida en que el útero va volviendo a su tamaño normal se pierden unos dos o tres kilos más.
El resultado suele ser que la madre haya ganado entre 4 y 5 kilos habitualmente y también es algo habitual que recuperar el peso sea una de las mayores preocupaciones para ella.
Lo peor que podemos hacer en este caso es caer en la desesperación ya que siguiendo unos hábitos saludables de alimentación y haciendo algo de ejercicio el cuerpo volverá a su anterior estado o incluso si se pone interés incluso a un mejor estado físico.
El trabajo para adelgazar después del embarazo en realidad empieza antes de que el bebé nazca ya que no es lo mismo para nada tener que bajar 5 kilos en lugar de tener que adelgazar 10.
Sabemos que es algo muy normal ganar unos kilos en el embarazo pero hay que tener claro desde el principio que hay que cuidarse bien para no ganar demasiado peso y no tener que perder demasiados kilos.
Hay que seguir una dieta balanceada y no dejar de comer, sino comer cosas saludables e ir controlando el peso durante el embarazo, de manera que cuando nace el bebé resulte más fácil volver al peso inicial.
Por otra parte el uso de las cremas hidratantes hará que las estrías no aparezcan ya que es un problema también de elasticidad en la piel.
Una vez que el bebé ha nacido, después de 9 meses los cambios son bruscos y el cuerpo necesita algo de tiempo para poder recuperar y volver a la normalidad.
Hasta que hayan transcurrido al menos 6 meses después del parto no es recomendable realizar ninguna dieta ni ningún deporte demasiado intenso.
Hay que tener en cuenta que una madre que da pecho a su hijo consume entre 1800 y 2500 calorías que es lo mismo que gasta un deportista de alto rendimiento y por ello hay que comer bien para recuperar y posponer el inicio de una dieta.
Además la nueva vida con el bebé en casa exigirá a la madre estar con un buen nivel de energía y bien alimentada.
Una alimentación baja en grasas y saludable para adelgazar después del embarazo es de gran ayuda al igual que cocinar siempre hervido, a la plancha o asado.
La ingesta de abundante agua, así como de vegetales y frutas es de gran ayuda para comenzar o seguir cuidándose después de dar a luz.
Después de la sexta semana después del parto se toman alimentos menos calóricos pero sin olvidarse de consumir suficientes carbohidratos, proteínas, vitaminas y minerales.
El deporte se puede comenzar a realizar de manera suave y sin forzar para que el cuerpo se vaya adaptando poco a poco y se puede hacer a partir de los 2 meses del parto pero siempre sin llegar a cansarse excesivamente.
Después de los 7 meses ya es el momento si se desea de realizar una dieta más estricta pero no olvidemos que par que el cuerpo esté en el peso ideal lo ideal es adoptar hábitos saludables de por vida y no realizar dietas que solo duren un tiempo pues en ese caso se suelen recuperar los kilos perdidos.