MENTIRAS QUE QUIEBRAN EN ALMA

MENTIRAS QUE QUIEBRAN EL ALMA

Mentiras son las que vives y respiras...
Desde que te fuiste mientes para tapar la cobardía de aceptar tus errores y arrepentimientos...
Mentiras son tus sonrisas y frases supuestamente agradables que solo disimulan la frustración que sientes por haberte equivocado...
Esas mentiras me reconfortan porque demuestran lo mal que estas lejos de mí...
Esas mentiras son mi verdad y tu castigo, debes mentir porque la realidad es dura y te duele...
Son puras mentiras tus días y solo las cree quien le conviene, solo las crees tú...
Eres puras mentiras...
-LuDelValle

Mentiras que duelen
Mentiras que estrangulan el corazón
Mentiras que te desaniman
Mentiras que dejan un vacio en el alma
Mentiras tan afiladas como un cuchillo
Mentiras blancas, rosadas o rojas
Mentiras que no son más
Que excusas para no afrontar la realidad
Mentiras que se dicen y que duelen
ésas que se dicen por pensar
si se piensan son más que una mentira
es un golpe directo al corazón.
-Mariposa Fénix


Alguien una vez dijo que, hay que tener el valor de decir la verdad, sobre todo cuando se habla de la verdad.
No hay sentimiento tan doloroso como la mentira. Una mentira más allá de la gravedad de su contenido, tiene que ver con el vínculo emocional que creamos con la persona mentirosa, ya que toda relación sana se basa en la verdad. La verdad acerca de lo que somos, lo que hacemos, nuestras intenciones, sueños y metas. Pero cuando las intenciones y sentimientos de la persona en quien confiamos o confiábamos no está definida ni por el mismo, pues acarrea mucho dolor y tristeza.
La patología de los mentirosos
La mentira compulsiva es un signo de trastorno patológico signo de un trastorno de personalidad este puede ser pasajero o duradero.
Ante un mentiroso es importante detectar la ganancia primaria y secundaria de sus mentiras, ya que en la ganancia se encuentra la respuesta de la carencia que sufre dicho sujeto. Muchas veces es signo de una baja autoestima ,y la necesitad cumple la función de generar aceptación y admiración, sobre todo si estamos a un mentiroso que constantemente se victimiza para buscar consolación.
Es un hecho, tratar de entender a un mentiroso es extremadamente complicado, sobre todo si es alguien cercano, creo que lo más doloroso al ver a un mentiroso es que sus mentiras se extiendan no solo a utilizar y manipular situaciones o personas a su beneficio, sino que llega un punto en que el propio mentiroso quedara tan saturado de sus propias mentiras que sufrirá de ansiedad y baja autoestima, que lastimosamente tratara de aplacar con mas mentiras.
Imaginen a un mentiroso que sufra de miedo a la soledad, con rasgos narcisistas. Si se cruzan con uno así en su vida afectiva y caen en su red, desearan no haber vivido. Estas personas son capaces de fingir emociones y apegarse a lo que sea porque simplemente no están cómodos consigo mismos.
Para muchos mostrarse tal y como son, más que un alivio es un remordimiento constante, difícil de encarar, y les resulta más fácil crear una bruma sobre la victimas de sus mentiras, para no afrontar la verdad sobre si mismo así que adornan y disfrazan lo que son para ser amados y aceptados, sobre algo que ni ellos mismos toleran de sí.
Aquí unas frases celebres al respecto:
· Estoy comprometido con la verdad, no con la consistencia.
Mahatma Gandhi (1869-1948) Político y pensador indio.
· Si buscas la verdad, podrás encontrar confort al final; si buscas confort, no encontrarás ni verdad ni confort.
Clive Staples Lewis (1898-1963) Escritor británico.
· La verdad mal intencionada es peor que la mentira.
William Blake (1757-1827) Poeta y pintor inglés.
· Cuando un sentimiento tan importante como la confianza se quiebra, algo en nuestro interior fallece. Esto ocurre porque la mentira pone en duda mil verdades, haciendo que nos cuestionemos incluso las experiencias que creíamos más francas.
Para entender la naturaleza de las mentiras es importante también entender al mentiroso.
Tipos de mentirosos
Según la psicología hay cuatro tipos de mentirosos específicos:
1. El mentiroso ocasional. Todos lo hemos sido alguna vez. Este tipo de mentirosos no suelen mentir, pero lo pueden hacer para protegerse a sí mismo o a otra persona. Su mentira es la forma de enfrentar el temor a alguna parte de su realidad. El mentiroso ocasional suele pensar muy bien lo que dirá para evitar contradicciones, pero como no está acostumbrado a mentir, su cuerpo lo delata.
2. El mentiroso frecuente. A diferencia del mentiroso ocasional, este mentiroso no se toma el tiempo de analizar sus argumentos porque siempre está mintiendo y ya sabe cómo hacerlo. A pesar de su experiencia, su cuerpo y expresiones físicas suelen contradecir sus palabras y sus actos.
3. El mentiroso natural. Este tipo de personas mienten continuamente y a veces ya no son capaces de diferenciar las mentiras de las verdades. Suelen caer en contradicciones obvias que luego tratan de corregir con argumentos muy sofisticados.

4. El mentiroso profesional. Este tipo de personas mienten para conseguir un objetivo específico. Ellos tienden a estudiar nuestros argumentos y saben que decir. Además suelen entrenarse para que dominar su lenguaje corporal y dar la imagen que desean.

“La culpa no fue del que confió, sino del que miente”
Los mentirosos natos son capaces de mentir con una franca sinceridad, ( si vale el termino) muchos mentirosos se dedican a actividades ilegales (como los estafadores), pero también pueden ser profesionales exitosos que dependen de la mentira para sobrevivir (como vendedores o políticos). Pero muy a pesar de su entrenamiento, existen pequeñas características y detalles que revelan sus mentiras como el lenguaje corporal.

Por qué porque existen mentirosos? Pues simple, si mentir supone una ganancia, muchos mentirán. La mentira es un fenómeno social, los medios de comunicación nos mienten, la publicidad nos miente, es lógico que las personas mientan para ser socialmente aceptadas. Pero vamos, hay una obvia diferencia entre responder a un conocido que estamos bien, cuando nos ven abatidos y andar por la vida fingiendo algo que no somos , ni sentimos para que otra persona se sienta mejor acerca de si mismo o para “llenar” una necesidad en nosotros mismos. En primera, porque al mentir a otros acerca de lo que sentimos por ellos es dar falsas esperanzas que al final acabaran por enredarnos en una telaraña muy ajustada. A prometer mentiras es mejor no prometer nada. Y en segunda, si mentimos para llenar el sentimiento de impotencia o vacio en nosotros mismos, los únicos engañados somos nosotros mismos, y no hay nada más penoso que ver a un hombre infeliz por su propia mano. “De que escapas, si lo que llevas dentro te sigue a donde vayas”?Quién miente busca en la mentira un “escape” de la realidad, crear falsa realidad para sí mismo conocida como “realidad paralela” donde se siente tranquilo por un tiempo, pero las mentiras lo carcomen en la soledad..
La mentira deriva de importantes factores como el estrés, angustia, dolor y baja autoestima. En las personas acostumbradas a mentir predominan estas características junto con la vulnerabilidad, el temor a fracasar y no intentar lo que realmente quieren o buscan.
A veces una verdad duele, pero una mentira mata lentamente.
“Es mejor una verdad dura, que un engaño, con la verdad se llega a sanar, con la mentira a enfermar.”
“Un vaso medio vacío de vino es también uno medio lleno, pero una mentira a medias, de ningún modo es una media verdad.”
“Si dices la verdad, no tendrás que acordarte de nada.”
El amor, cariño y confianza tienen una muerte lenta y por desgaste, muere por desaliento, desilusión y mentiras. Enmendar el daño de una mentira u omisión es difícil, el perdón siempre es posible y sano porque no somos carceleros de nadie. Pero cuantos estamos dispuestos a empezar otra vez a confiar? La verdad es que muy pocos.
Creo que lo más difícil es ver personas que creen continuamente estas mentiras, porque les es más fácil vivir aferrados a la esperanza. Decir la verdad, aferrarte a lo correcto siempre es difícil, pero ni por un segundo dudo de sus recompensas.