Psicoterapia en los problemas de erección psicológicos

Si hablamos de problemas de erección psicológicos, puedes pensar que es tentador dirigirte al médico y pedir una receta de la famosa pastilla azul cuando estás experimentando algún tipo de problema eréctil, pero la popular pequeña píldora y otros medicamentos para la disfunción eréctil sólo son necesarias en algunos casos de problemas de erección físicos. No son una solución efectiva ante un problema de erección psicológico. ¿Cuáles son las opciones si la incapacidad para tener o mantener una erección se debe a un problema de erección psicológico? Te las contamos a continuación.

¿Cómo ayuda la psicoterapia ante un problema de erección psicológico?

Un terapeuta puede ayudar tanto a abordar un problema de erección psicológico como uno físico, incluso como la eyaculación precoz.

Si estamos experimentando dificultad para conseguir una erección, es importante realizar un examen médico completo, aunque a menudo, la disfunción eréctil es debida a la ansiedad de rendimiento. Mientras más te preocupes en tener una erección (al igual que cuando se trata de conciliar el sueño), lo más probable es que más dificultades tengas para conseguirlo. La terapia puede ayudar al hombres a dejar de lado su preocupación acerca de la erección y aprender a relajarse y disfrutar de la experiencia sexual y sensual.

Psicoterapia y tu relación

La psicoterapia, a menudo llamada terapia de conversación, es una manera importante de construir una relación comunicativa más fuerte y, por lo tanto, una vía para que el problema de erección psicológico no vuelva a aparecer.

Cuanto más cómodo te sientes con tu pareja y con la intimidad, en menor medida experimentarás estrés y la presión en el dormitorio, y por consiguiente disfunción eréctil. La conversación, el diálogo y el cambio de patrones en una relación de pareja con frecuencia aumentan la sexualidad saludable, así como también mejorando la vida sexual a menudo aumenta la conexión y amistad con la pareja, contribuyendo así a resolver otros problemas.

Debo darle una oportunidad a la psicoterapia?

Si tu médico no encuentra una razón física para tu impotencia, un problema de erección psicológico puede ser la causa. Éstos incluyen:

La ansiedad o nerviosismo ante el sexo

El estrés en el hogar o en el trabajo

Problemas de pareja

Problemas de comunicación con la pareja

Sentimientos de auto-conciencia durante las relaciones sexuales

Las altas expectativas de sí mismo o de la pareja acerca del rendimiento sexual

Depresión

Ansiedad general

La falta de interés en el sexo

Los problemas con la autoestima

¿Cómo trabaja la psicoterapia ante un problema de erección psicológico?

La psicoterapia enfocada a problemas de erección psicológicos puede ser beneficiosa para una persona, pero las sesiones de terapia de pareja también son útiles. A menudo es bueno para una pareja asistir a una sesión inicial en conjunto para abordar los problemas y preocupaciones. Las sesiones individuales pueden abordar los problemas con cada individuo y conducir a la pareja a algunas sesiones para trabajar en equipo. Este enfoque puede ayudar a alcanzar un problema de erección psicológico externo y descubrir lo que necesita ser tratado y hablado, con el fin de disfrutar de la intimidad física y emocional.

Las sesiones de psicoterapia pueden ayudar a aprender a lidiar con la ansiedad, tanto dentro como fuera de la habitación. A veces, las sesiones de terapia son tan simples como ayudar a las parejas a entender lo que sucede en la vida sexual de las parejas “normales”. La terapia de pareja también puede incluir aprender a hablar de sexo en formas que ayuden a bajar sus corazas y abiertamente discutir sus necesidades, deseos y anhelos.

Durante estas sesiones podrás hablar de tus necesidades y expectativas sexuales, así como lo que impide que sean satisfechas. Algunas sesiones pueden implicar la priorización de los diferentes aspectos del trabajo, la vida familiar, así como la relación y la relación sexual.

El problema de erección psicológico puede estar causado por un factor emocional, y aquí es donde la terapia psicosexual puede ayudar. Por desgracia, con demasiada frecuencia suponemos que nuestros cuerpos son máquinas y que van a trabajar de forma independiente a la mente y las emociones. Nuestros cuerpos son complejos y, sexualmente, requerimos que el cuerpo, el cerebro y las emociones trabajen juntos para ser realmente eficaz y para que podamos disfrutar del sexo. Al igual que con un circuito eléctrico, si hay interrupciones en el sistema no va a funcionar como una unidad. Parte del proceso de la terapia psicosexual sería pensar en cuáles son los problemas emocionales y / o psicológicos subyacentes. Este proceso es un primer paso importante para que las parejas empiecen a resolver su problema de erección psicológico. Junto a esto, el terapeuta podría entonces asesorar al cliente para seguir un programa gradual de tipo cognitivo-conductual, adaptado individualmente, que el cliente lleva a cabo en el hogar, ya sea solo o con su pareja, entre las sesiones de terapia. Esto permite a los clientes comenzar a lograr y mantener una erección, una vez más, gracias a la construcción gradual de la confianza.

La pareja participa en el proceso de la terapia cuando es posible y por lo tanto no es raro ver a los clientes con su pareja cuando uno de ellos tiene problemas de erección. Esto se debe a los problemas de erección psicológicos pueden dar lugar a todo tipo de dificultades en la relación si no se tratan adecuadamente. A menudo es el hombre con los problemas de erección el que se siente responsable de estos problemas y, por lo tanto, asume que es su problema a resolver; Sin embargo, si estás en una relación, los problemas de erección afectan a ambos individualmente y como pareja, y es importante que ambas partes se sienten apoyados por igual en la resolución de los problemas.

Parte de la fase de evaluación inicial de un terapeuta psicosexual debe ser evaluar las posibles causas físicas o médicas para los problemas de erección haciendo las preguntas adecuadas, y luego enviar a sus clientes de nuevo a su médico de cabecera si es necesario. Sin embargo, incluso si hay una causa médica, la terapia psicosexual puede todavía ser de gran beneficio para ti y tu pareja. La terapia de pareja puede ayudar a pensar en formas nuevas o diferentes de entender la intimidad juntos cuando las relaciones sexuales con penetración sean más difíciles o imposibles. También puede ayudar a aliviar algo la presión que uno o ambos están sintiendo mientras cumplen el tratamiento y para gestionar mejor el impacto de esa presión en la relación.

Cualquiera que sea la causa de sus problemas de erección, es importante recordar que hay ayuda disponible a través de tu médico de cabecera y los servicios sanitarios locales, y también a través de la terapia psicosexual y la de pareja. Si no estás seguro de si necesitas ayuda o no, habla con tu médico de cabecera, o ponte en contacto con un terapeuta psicosexual o de pareja, de buen grado le aconsejará sobre la mejor manera de buscar ayuda para tus circunstancias individuales.

Encontrar el terapeuta adecuado

Si tu médico sugiere que un problema de erección psicológico puede estar desempeñando un papel en la disfunción eréctil, quizás sea capaz de recomendarte un buen terapeuta. Si estima que la terapia sería útil, el médico puede saber qué tipo de terapeuta especialista conviene visitar.

Hay momentos en que las parejas reconocen que el origen psicológico del problema de erección versa más acerca de su relación o temas individuales que se interponen en el camino de la intimidad física a la hora de relajarse y disfrutar. En este caso, un individuo o la pareja deben buscar un terapeuta calificado en terapia familiar, que tenga experiencia en el tratamiento de las cuestiones relativas a las relaciones y la disfunción eréctil.

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