Incluso se atrevió a ponerle fecha: el 2045. Si bien es cierto que no se podía basar en fundamentos científicos (aún) que apunten a ello, sí hablaron en esta cumbre de los logros en el terreno del rejuvenecimiento de tejidos y células. Es decir, aseguran ya haber conseguido "curar" el envejecimiento en ratones y que habrá una oleada de investigaciones y experimentos en esta dirección, de forma que los cambios conseguidos en animales sean permanentes y puedan lograrse en humanos también.
3 ponentes apuntaban en esta dirección, Cordeiro, Rodolfo Goya, que afirmó que "la fuente de la eterna juventud está relativamente cerca", y Aubrey de Grey. Tan solo uno de los ponentes no ve tan clara como el resto esta afirmación (de momento). Este, precisamente, es el líder de la investigación que consiguió alargar la vida a animales mediante reprogramación celular, Juan Carlos Izpisúa, categorizando de primitivo el desarrollo alcanzado hasta la fecha.
Hay un plan B: la criopreservación. Actualmente órganos como el corazón solo se pueden criopreservar durante un muy corto periodo de tiempo. No obstante, Cordeiro asegura que en pocas décadas se podrá usar estas técnicas con el cuerpo entero de una persona a punto de morir, para reanimarla cuando se le pueda curar de su enfermedad.
Resumiendo, estas son las opiniones de los expertos que asistieron a esta cumbre en el Centro Superior de Investigaciones Científicas, basadas en los avances actuales y en el progreso agigantado de la ciencia que, afortunadamente, apunta a que podremos prolongar la vida mucho y, puede que aún más, hacernos inmortales. La pregunta ahora es: ¿creéis vosotros que asistiremos al día en que alcancemos de verdad la inmortalidad?