Esta semana se celebra la Semana Europea del Cáncer de Pulmón. En España se diagnostican cada año 18.000 nuevos casos de cáncer de pulmón en hombres y más de 2.000 en mujeres, una enfermedad atribuible al tabaco en más del 80% de las ocasiones. Sin embargo, mientras en los varones se está observando una disminución del hábito tabáquico, el número de mujeres fumadoras entre 1987 y 2003 ha aumentado un 8%.
Esto se ha traducido en un incremento de la incidencia y la mortalidad de este tumor en el colectivo femenino hasta en un 4% cada año, de forma que el cáncer de pulmón supone la tercera causa de muerte entre mujeres, después del cáncer de mama y el colorrectal.
El principal problema es que la mayoría de los tumores se diagnostican en estado avanzado. Por ello, los oncólogos recuerdan que cualquier persona con cáncer de pulmón no microcítico tiene derecho a realizarse el test de mutaciones EGFR, con el fin de poder acceder a una terapia personalizada eficaz y con menos toxicidad.
Los expertos explican que los pacientes que tienen mutaciones en el gen EGFR tienen un cáncer de pulmón con una evolución distinta, presentan un mejor comportamiento y una supervivencia libre de progresión mayor. Además, este colectivo es candidato a fármacos dirigidos específicamente contra esta alteración molecular que favorece la diseminación del tumor.