Los árabes utilizaban esta planta para tratar todo tipo de dolencias relacionadas con el corazón, incluso en el sentido metafórico, ellos utilizaban la melisa para tratar “el mal de amores”.
Es una planta con abundancia de principios activos que ayudan a equilibrar y relajar el sistema nervioso. Por sus propiedades se destaca como planta sedante, antiséptica, antipirética, digestiva y reguladora de la menstruación.
En los estados de confusión mental, nauseas, mareos, indigestiones, flatulencias y múltiples trastornos gástricos las infusiones de hojas de melisa son un remedio eficaz. Son un remedio eficaz para combatir el mal aliento.
También es utilizado como ahuyentador de insectos gracias al aroma de sus hojas y los aceites esenciales que contiene.
Es un buen remedio contra el insomnio ya que presenta propiedades ligeramente hipnóticas.
Gracias a sus propiedades antiespasmódicas es un buen tónico muscular que nos hará evitar calambres y espasmos. Si añadimos una infusión de melisa en al agua del baño conseguiremos este efecto.
Como no todo iba a ser bueno esta planta presenta algunas contraindicaciones. No es recomendable en personas que reciben tratamientos sedantes ni en mujeres embarazadas ya que puede estimular el útero y provocar abortos.
Se puede utilizar de múltiples formas: en infusión, en forma de aceites esenciales, en crema o ungüento, en tintura… etc.
Videos relacionados: