¿Te imaginas cómo sería tu vida sin poder oír absolutamente nada? Esta es la situación a la que se enfrentan cada día las personas que padecen pérdida auditiva severa o total. Una realidad que desde hace veinticinco años ya tiene solución gracias a la utilización de la técnica del Implante Coclear multicanal (IC).
El Implante Coclear es un dispositivo electrónico que transforma las señales acústicas en impulsos eléctricos que estimulan el nervio auditivo y envían el sonido al cerebro. Se coloca en el interior del oído mediante una sencilla intervención quirúrgica. Tras la operación, la persona implantada debe realizar todo un proceso para recuperar la audición, a través de una rehabilitación auditiva, sesiones de programación y de ajuste del IC. Este seguimiento se realiza en un centro especializado con el apoyo y atención de un profesional en audiología.
Gracias a esta técnica cada vez más personas con trastornos severos de audición han podido volver a oír. En los últimos años, gracias a la evolución de la tecnología, el tamaño de los dispositivos se ha reducido considerablemente, lo que ha permitido que se pueda implantar en niños muy pequeños. Este es un factor clave, ya que está demostrado que cuanto antes se detecta el trastorno auditivo y se implanta el IC, mayores son las posibilidades de que el niño pueda desarrollar con normalidad la audición y el lenguaje.
Los candidatos a recibir un implante coclear son aquellas personas con un alto grado de pérdida que no consiguen recuperar la audición con un audífono. Después de la intervención los usuarios recuperan la capacidad auditiva, pueden hablar con más claridad y comprender el lenguaje con facilidad sin necesidad de leer los labios.
Actualmente, en España existen 40 centros implantadores en todas las comunidades autónomas excepto Cantabria, La Rioja, Ceuta y Melilla. Tanto el estudio como el tratamiento quirúrgico están subvencionados por la sanidad pública en su totalidad, siempre y cuando se realice en los centros acreditados.
¿Lo conocías?
Imágenes (por orden de aparición): Daniela Vladimirova/Flickr y Claudio Matsuoka/Flickr.